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Serie: Relatos, reflexiones y otros aportes para rescatar la Memoria, a 50 años del golpe de Estado en Chile. Adolfo Vargas Jofré, Periodista UCN.  Desde... La democracia “mató” a los diarios y revistas que se la jugaron contra la dictadura

Serie: Relatos, reflexiones y otros aportes para rescatar la Memoria, a 50 años del golpe de Estado en Chile.

Adolfo Vargas Jofré, Periodista UCN.  Desde La Tirana.- 

Quienes leyeron mi anterior columna tomaron conocimiento cómo cerró el diario Fortín Mapocho, uno de los baluartes del retorno a la democracia y vital en el triunfo del NO en el plebiscito del 88.

Enrique Correa, ex dirigente del Mapu y quien se asiló para el 73 en la embajada de Alemania Federal, siendo Ministro Secretario General de Gobierno del Presidente Aylwin (el mismo de “En la medida de lo posible”) fue el encargado de sepultar a este diario y a La Época, y a las revistas como Análisis, APSI, Hoy , Cauce y otros medios que durante la dictadura se la “jugaron” por los que llegaron al poder junto a la Concertación de Partidos por la Democracia.

En su ministerio se concentraban los recursos publicitarios del gobierno del DC Aylwin y los siguió destinando en casi su totalidad a los medios informativos dejados en manos de empresarios de la derecha ( también de la ultra) por la dictadura cívico militar. Y algunos de estos medios fueron sediciosos y golpistas.

Mientras trabajaba en el Fortín y siendo parte del sindicato de trabajadores de ese medio, me eligieron como delegado del personal ante la comisión que buscaba crear el nuevo periódico, acorde a los nuevos tiempos.

Recuerdo de haber sido parte de las propuestas para una consulta ciudadana a través de una empresa dedicada a lo que se denomina Focus Group, donde estableció un temario de 40 posibles temas periodísticos. Extrañamente lo que había sido clave en la dictadura, los derechos humanos, los encuestados lo dejaron en el lugar 35, y privilegiaron el deporte, espectáculos, policía, parlamento y gobierno, entre otros temas.

Esta fue la propuesta llevada ante las principales autoridades del gobierno democrático que nacía y que se le solicitaba el apoyo a través de la publicidad, la misma que le fue negada a estos medios durante la dictadura. El duopolio (El Mercurio y La Tercera) recibió de Pinochet y sus socios de la derecha, el 90 por ciento de su financiamiento. Y el mismo trato continuó gracias al Guatón Correa.

El “pelambre” decía que recibía permanente a la hija mayor de Pinochet, la Lucía Pinochet Iriarte, quien era la que le llevaba los recados de su padre, quien consideraba a este político y ministro “como el más inteligente del Presidente Aylwin”. Yo no me sentiría muy orgullosos de este reconocimiento…

Y era ella la que  insistía en el cierre de la prensa de oposición, pero principalmente del Fortín, a cambio de “no molestar” al gobierno.

Es así que la unión del duopolio político, es decir la Alianza Por Chile (la ultra y la derecha unida) más la concertación  han hecho tanto o más daño a la libertad de prensa que la misma dictadura, esforzándose por concentrar más del 90 por ciento de los medios informativos en manos de empresas de derecha, muchos de los cuales  como El Mercurio y su dueño ya fallecido Agustín “Dunny” Edwards fueron instigadores del Golpe que llevo a la muerte al Presidente Constitucional Salvador Allende Gossens.

A fines de mayo nos citaron a todos los trabajadores al diario, que se ubicaba en calle Agustinas, al lado de la Universidad de La República, en pleno centro de Santiago, para darnos la mala noticia y el pago del finiquito. Hubo muchos trabajadores y muchas trabajadoras que no recibieron nada, porque la empresa no tenía los recursos.

De sus dueños nunca supimos nada. Ni siquiera fueron capaces de dar la cara, como el presidente de la CUT de la época, Manuel Bustos, ya que el 30 % del diario le pertenecía a la entidad; y menos de Lavandero que estaba preocupado de su campaña como candidato a senador al igual que Sergio Bitar, quien fuera elegido posteriormente senador por Tarapacá.

Así, sin  pena ni gloria, y tras la última paletada los políticos de la democracia sepultaron para siempre al diario Fortín Mapocho, cuyos integrantes estuvieron dispuestos a jugarse la vida por informar a Chile las atrocidades que cometía la dictadura cívico militar.

Esta historia aún no termina… aún tengo que contarles mucho más… Hasta la próxima amigas y amigos …

 “Estados Unidos no se siente orgulloso de la política seguida hacia el Gobierno del doctor Allende ni de su apoyo a la dictadura posterior”. Colin Powell, Secretario de Estado de Norteamérica, en declaración a la prensa yanqui en abril de 2003.

NOTA RELACIONADA

Mi breve paso por el diario Fortín Mapocho

 

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