“A la Memoria de mi Padre”, libro que rinde homenaje en vida a legendario pampino Mario Godoy, y escrito por su hijo Marcos

Alejandra Matus fue la figura estelar que asistió al lanzamiento del libro, ccuya ceremonia se realizó en la Casa Municipal de la Cultura.

Anyelina Rojas Valdés.- A  los 90 años, el longevo pampino, cuentacuentos, aventurero, excarabinero y fundador de una familión con 6 hijos, muchos nietos y bisnietos, Mario del Carmen Godoy Ruiz fue el protagonista de una emotiva jornada familiar, donde su hijo Marcos Godoy González, lanzó el libro de su autoría “A la Memoria de mi Padre”, evento realizado en la Casa Municipal de la Cultura de Iquique.

Marcos tenía en mente realizar un homenaje en vida a su padre y en esa aventura sumó a toda la familia. El recopiló los relatos que con lucidez y memoria increíble, su progenitor -un contador de cuentos-, nuevamente contó; mientras que el resto de la familia se sumó en diversas tareas, generando un evento emotivo, lleno de amor y energías, con un público que iba desde los más pequeños, aún lactantes, hasta don Mario, el patriarca y su esposa, la poetisa Magdalena González. Son 65 años de matrimonio.

Durante la jornada se mostraron una serie de recopilaciones audiovisuales, que dieron la emotividad e hilaridad que se extendió durante toda la jornada. También se exhibió un video con palabras del mayor de los hermanos Godoy González, que está radicado junto a su esposa Sandra en Estados Unidos, desde hace 32 años y en donde desarrolla una fructífera labor en materia de docencia.

PERIODISTA Y AMIGA

A la ceremonia de lanzamiento, asistió la destacada periodista, escritora y dramaturga, Alejandra Matus, que lo hizo principalmente en calidad de amiga personal de la familia y conocedora de las virtudes del homenajeado, a quien conoce desde sus años de adolescencia, cuando ella vivía en Iquique, en la Villa Magisterio.

“La lectura de este libro, por supuesto que es en gran medida un recuerdo íntimo para la familia, para los nietos, pero es también, un corte transversal en la historia de Chile. Me alegro mucho que esta familia que haya tenido la generosidad y la visión también de escuchar a su padre”.

“Digo que es un corte transversal a la sociedad chilena, porque la historia de don Mario es la historia de muchos y muchas. Es la historia de un niño pampino, que  se cría en condiciones muy rudas… como buen pampino, siempre le saca la lonja más feliz a cada episodio, que uno puede percibir en cada relato, o que se omite para no estropear el relato”.

También se refirió a la condición de don Mario de haber sido carabineros, jubilando como Sub Oficial Mayor, destacando cómo se las arregló para ser íntegro y coherente, durante los años de dictadura, arriesgando la vida incluso, en pequeñas acciones.

Periodísticamente le llamó la atención en uno de los relatos de don Mario, que se refiere a que un juez de la República, Mario Acuña, aparece al otro día del golpe, vestido de militar (fue el fiscal de Pisagua y quien dirigió los consejos de guerra, declarados ilegales durante los últimos años).

“A don Mario le tocó encontrarse fugazmente con él, al mando de un capitán que se opone a que Mario Acuña, deje en la Comisaría a los detenidos, por esa razón probablemente fue castigado, Pero eso también salvó a don Mario de haber tenido que tomar decisiones que otros colegas de él, no pudieron evitar, como era torturar…”

Finalmente felicitó al autor del libro y a la familia, por rescatar los relatos de don Mario, “porque todas y todos tenemos historias, que merecemos contar”, concluyó.

Palabras de Alejandra Matus, al final de la jornada:

PROFESOR Y ESCRITOR

También asistió como invitado especial sumándose a la mesa de la testera junto al autor, Iván Salas Madrid Profesor, escritor, gestor cultural del Valle de Elqui, hijo ilustre de la comuna de Vicuña. Actualmente radica en Arica en labores educacionales y culturales.

Iván Salas es quien escribió la contraportada del libro “A la Memoria de mi Padre”, donde en parte señala “…publicar este libro es un regalo no solo al patrimonio familiar, al de la infinidad de lugares habitados por el protagonista y su familia, sino también al acervo cultural del norte chileno”.

Dice que el libro “A la Memoria de mi Padre”, lleva a imaginar “al hijo pequeño que escucha de esas historias con los ojos brillantes y nos motiva a agradecer a este hijo que hoy se hizo hombre sin permiso, que las escribe con la mejor de las plumas que entrega el arte y la vida”.

A un costado de la testera, en otra mesa destacada, se ubicó el matrimonio Godoy-González. Allí, Magdalena,  poeta tocopillana con varios poemarios publicados leyó el primer relato del libro recuperado por su hijo Marcos, recordando la niñez temprana del homenajeado.

LA HIJA MAYOR

La siguiente intervención la hizo la hija mayor, Miriam Godoy González, profesora en Castellano y Filosofía, quien es directora de escuela en Chañaral, quien habló de forma coloquial haciendo reír a la concurrencia, para luego dar lectura al relato “Por Siempre Magdalena”, que leyó destacando a su progenitora.

Y con una prosa armoniosa, recorrió los 67 años de unión de sus padres, luego que Magdalena a sus 22 años, invitara al joven pampino, a caminar. Y caminaron tres años; y caminaron toda una vida, dijo.

ESPACIO ABIERTO

Previo a todo este arcoíris de emociones, las palabras de bienvenida las entregó Diego Zarricueta Rojas, director de la Casa Municipal de la Cultura de Iquique, dependiente de la CORMUDESI, señalando que “este espacio cultural se levanta como una propuesta amplia, que se abre a diversas iniciativas de la comunidad, “tan amplia como es la cultura, especialmente en una ciudad que tiene mucho movimiento”.

“Destacamos que nos hemos transformado en un epicentro de libros de autores locales, lo que nos deja  muy satisfechos como Casa de la Cultura, porque eso indica que nos hemos posicionado como un lugar de confianza para los escritores de Iquique y la Región”, añadió Diego Zarricueta, remarcando que “a través de este espacio y del apoyo que brindamos también se fomenta que la comunidad pueda tener momentos de diálogo, de encuentro y de reflexión”.

Respecto de la línea del libro, dijo que se valora el ejercicio de memoria “que se hace a nivel de familia, de reconocer dónde está el origen del traspaso de tradiciones, de costumbres y por sobre todo las relaciones que se entablan a nivel familiar”, en consideración que ese es el primer espacio de socialización, a la que nos enfrentamos las personas.

HABLA EL AUTOR

Emocionado el autor, agradeció a sus padres y su familia. Recordó que tenía la idea de escribir el libro, y que fue la vida la que se confabuló para cumplir con ese propósito. Y son su padre vivo.

Dijo que puso toda su concentración, “para rescatar de la memoria de mi padre, todas estas historias de vida. (…) Saber cómo contar historias es todo un arte, y mi padre tiene un verdadero doctorado en esta materia”, señaló, indicando que fue su hogar la locación donde se produjeron estos encuentros de conexión con el pasado “para volver a recordar las aventuras y a rescatar los nombres de personas y personajes que volvían a la memoria con nombre y apellido. Muchos con los dos apellidos”.

Cuenta Marcos que el libro lo conforman 47 historia, de más de setenta que se escribieron cronológicamente en 5 capítulos: niñez, juventud, matrimonio, Carabineros de Chile y su vejez.  Añade que fue su madre que se dio el trabajo de escribir  123 nombres que fueron apareciendo en los relatos.

En lo más íntimo, señala que puso en práctica la técnica de la escucha activa “escuchar con conciencia. Solo estábamos los tres en torno a la mesa, mi madre, mi padre y yo, y le pedí a mi padre que volviera en el tiempo y memoria para que desde la infancia hiciera el recorrido por su historia de vida”.

Este ejercicio le permitió tener un mayor conocimiento de su progenitor y entender incluso, cómo iba pensando, obteniendo una comprensión mucho más profunda. Por lo mismo, el autor extendió una invitación para que otras personas, hagan también este ejercicio y plasmen en un libro sus historias y la de sus seres queridos.

Palabras del autor, al cierre de la jornada

ENTREGA DEL LIBRO

Tras sus palabras, el autor, Marcos Godoy González, -Maggol-, hizo entrega del libro a su padre, quien recuperado de la emoción, recitó  una poesía , “su caballito de batalla”, que aprendió hace más de 70 años. A la declamación se fueron sumando sus hijos y nietos, en un grato momento de relajo, ya que el poema tenía un gran sentido de pícaro humor.

Y al cierre, junto a su esposa Magdalena, bailaron el mismo vals, que bailaron para su matrimonio.

ALGUNAS FOTOGRAFÍAS

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