Concejala Cortés sobre caso Casino Fach: «Lo censurable es que el Estado dispone de un recinto y niega su uso en emergencia sanitaria»
Actualidad 18 mayo, 2020 Edición Cero
Molesta reaccionó la concejal de Pica, Catalina Cortés, quien denunciara a lo menos, una fiesta en el Casino de la Fach, en esa comuna, junto a su colega Rodrigo Vargas, hecho que el Intendente Miguel Ángel Quezada descartó señalando que sólo se trataba de ruido y volumen alto. «Entendemos el rol político del intendente de defender hasta lo indefendible, por lealtad a su gobierno, pero que ello implique desvirtuar las cosas, es simplemente incomprensible e innecesario».
También dirigió palabras al general Guillermo Paiva, que mantuvo la misma línea explicativa que Quezada. La concejala criticó por el tono de voz del alto militar al dirigirse a la ciudadanía, sin pensar «que no somos sus subalternos a los que seguramente alza la voz».
Insirió que el Casino de oficiales de la FACH, pertenece al Estado de Chile. aunque dependa administrativamente del Bienestar de esa institución. «Se trata de una dependencia institucional, cuyo jefe nacional pertenece al alto mando de la Fach».
Tanbién descarta que los incidentes, fiesta o ruidos como calificaron las autoridades, ocurrieran sólo una vez, porque en menos de cuatro días «se registraron hechos que alteraron el descanso de los vecinos del sector, es decir, ésto no no dice relación con un hecho aislado».
Y añade que «los gritos, bailes y música en alto volumen, registrados en videos, son claras evidencias de la realización de fiestas; negarlo resulta hasta irresponsable e irrespetuoso por parte de la autoridad». Y que fue «el propio general a cargo del estado de excepción constitucional en Tarapacá, califico el hecho como grave y que se sancionarían a los responsables».
Finalmente aclaró que lo importante para la comunidad, no se reduce al tema de las fiestas, «sino que nos hayan negado el recinto para que sirviera de residencial sanitaria para los afectados de nuestra comuna. Eso es lo censurable , que el Estado dispone de un recinto y niega su uso. Peor aún, hoy justifica lo que nosotros denunciamos como fiestas».
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Válida y necesaria la aclaración de la Concejal a las dos autoridades que tratan de minimizar los hechos en el recinto de la Fach, calificándolos sólo de «ruidos molestos». Cuando las faltas son de personas civiles ocurre lo contrario, calificándolos a priori como delitos y en prisión preventiva, cuando no tendrán pena aflictiva, lo peor es, como señala la autoridad comunal, es que un recinto del Estado no se facilita para colaborar con el proceso sanitario de personas de la localidad, que deben ser trasladas a Iquique para seguir con sus cuidados.