La Cantata Santa María de Iquique: Más tarapaqueña que nunca
Opinión y Comentarios 24 diciembre, 2024 Edición Cero

Jaime Ceballos, Poeta y profesor.-
Escuchar La Cantata de Santa María de Iquique, del iquiqueño Luis Advis, ahora en versión bronce, es sencillamente una experiencia alucinante, cargada de una enorme fuerza telúrica y una renovada rebeldía.
Ya la Cantata original de fines de 1969 era innovadora, puesto que mezclaba música folclórica con elementos de la música docta y religiosa. Pero el “experimento” del Huevo Sanhueza va más allá, no sólo porque incorpora ritmos e instrumentos típicos del norte tarapaqueño; expresado en las bandas de bronces (que acompañan las manifestaciones religiosas, civiles y festivas) o el cachimbo, nuestra auténtica danza nortina. Sino también, porque agrega relatos con ritmos urbanos como el Rap y el Hip hop.
De este modo, y hay que decirlo bien fuerte, el talento mancomunado de arregladores e instrumentistas, relatores e intérpretes, directores y productores, dio como fruto esta obra maravillosamente identitaria, que aporta un nuevo aire a La Cantata tan clásica y tan nuestra, en tanto la rejuvenece y la enraíza a nuestro ser colectivo y tarapaqueño.
Lo anterior cobra mayor relevancia en estos tiempos convulsos, donde los “profesionales del olvido” vuelven por sus fueros y pretender hacer tabula rasa respecto de los hechos vergonzosos ocurridos tantas veces a lo largo y ancho de La Pampa.
Este es un verdadero hito creativo y musical, que estoy seguro, acompañará las nuevas luchas que daremos por más dignidad y más justicia. Somos Nortinos, iquiqueños y pampinos, sabemos de donde venimos y que queremos. Nada ni nadie está olvidado…!!
Querido Huevo, una vez más, mil gracias.
VENCEREMOS