Edición Cero

El desalojo de una de las tomas más grandes de Pozo Almonte, ubicada en terrenos fiscales del sector Villa Millenium, vuelve a poner de... Core J.M. Carvajal por desalojo de toma en Pozo Almonte: “Es urgente construir viviendas en Tarapacá”

El desalojo de una de las tomas más grandes de Pozo Almonte, ubicada en terrenos fiscales del sector Villa Millenium, vuelve a poner de manifiesto el grave déficit habitacional de la región de Tarapacá “que alarma y preocupa sobre todo en el contexto actual de pandemia, con altas tazas de desempleo provocado por la cuarentena que agudizó la precariedad de las condiciones de habitabilidad de las familias más vulnerables de nuestra región”, dice el Consejero Regional José Miguel Carvajal.

Según el Censo de 2017, en Tarapacá se necesitan 13.705 viviendas nuevas. De ellas, 5.706 son viviendas irrecuperables, 5.652 son hogares allegados, y 2.347 son núcleos allegados con independencia económica, en condiciones de hacinamiento. Esta problemática social se concentra en Iquique, Alto Hospicio y Pozo Almonte.

“En Taparacá tenemos la mayor cantidad de personas viviendo en “tomas” del país. El informe indica que entre 2011 y 2019 aumentaron de 6 a 40. En Antofagasta, la otra gran región minera pasaron de 28 a 79, en igual periodo”, dice Carvajal, recordando que según datos del Minvu, «en nuestra región, cerca de 20 mil personas viven en campamentos, es decir, 4 mil familias aproximadamente”.

Añade el consejero que las familias que no trabajan en minería «se ven forzadas a vivir en tomas porque no pueden pagar un arriendo que sube por el importante número de trabajadores mineros foráneos que llega a habitar en Iquique, Pozo Almonte y Pica, y que tienen sueldos muy superiores a otras áreas productivas”. “Paralelamente ha proliferado un mercado abusivo que obliga a subarrendar pequeñas habitaciones que no cuentan con servicios básicos, con instalaciones eléctricas inseguras y arriendos ilegales”.

A su juicio el problema es que las UFs destinadas son insuficientes. «En Tarapacá para construir proyectos sociales hay que tener la suerte de conseguir un terreno que esté en condiciones. Luego las empresas constructoras hacen el cálculo y, por ejemplo, no es lo mismo edificar en Cavancha que en Pozo Almonte, por el altísimo valor de la tierra, encareciendo la vivienda y obligando a estas empresas a destinar gran parte del fondo en comprar y así la casa sería de un dormitorio. Finalmente no participan en las licitaciones”.

Explica que a veces los comités de vivienda obtienen un subsidio, tienen el dinero en sus manos, pero no logran dar con una empresa que construya el proyecto, o siguen esperando la llegada de mayores recursos.

Si bien el año pasado el entonces ministro de Vivienda, Cristián Monckeberg anunció la construcción de siete proyectos de vivienda (5 mil soluciones habitacionales y 1.645 viviendas), y que en los próximos siete u ocho años aumentarán a siete mil más para disminuir la crisis habitacional para Alto Hospicio e Iquique, “hasta hoy no hay un anuncio similar para las comunas de la provincia de Tamarugal, puntualmente para Pozo Almonte que al ser comuna “dormitorio” de la minería ha visto incrementado brutalmente la cantidad y extensión de tomas”.

Esta semana se anunció la construcción de la segunda etapa del proyecto La Pampa en Alto Hospicio. “Sin duda un aporte al déficit en Tarapacá que rescata a 640 familias. Por eso hago el llamado a las autoridades: por favor, es urgente invertir prontamente en la construcción de viviendas en las comunas de Pozo Almonte, Pica, y en todas las de la provincia del Tamarugal que de paso genera trabajo, el otro gran problema que enfrentan a diario y que intensifica su precariedad”.

Carvajal señala que si bien el Estado llega con políticas centralistas, «la región pudo haber hecho un esfuerzo adicional en estos años, quiero decir las autoridades podrían haber sido más activas y de haber mas viviendas también bajaría el precio de los arriendos”,.

 “Las comunidades de Tamarugal también necesitan tener viviendas bien ubicadas y equipadas, construidas en calles pavimentadas. Son muchos años de vivir en tomas, con graves problemas de hacinamiento, o en viviendas inestables y dañadas, soñando con una mejor calidad de vida. En toda la región de Tarapacá uno de los focos de necesidad más importantes es la vivienda social y de clase media”, concluye el consejero.

Los comentarios están cerrados.