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Ante los acontecimientos que estremecen en estos momentos  a nuestro país, el Colectivo Político “Por Cambios de Verdad” de Tarapacá declara: La grave crisis...

Ante los acontecimientos que estremecen en estos momentos  a nuestro país, el Colectivo Político “Por Cambios de Verdad” de Tarapacá declara:

  1. La grave crisis social y política que hoy vivimos, cuya expresión es la poderosa rebelión popular contra el Estado, tiene su causa en la imposición por la fuerza bruta, bajo la égida de una sangrienta dictadura, del modelo económico neoliberal imperante, creado en Estados Unidos y aplicado en nuestra Patria en calidad de experimento, obviamente, como un experimento del propio imperio estadounidense. El modelo se basa en la sustitución del Estado del control de la vida nacional, no sólo en el aspecto económico, sino educacional, sanitario y previsional, en favor de intereses privados, fundamentalmente de las mega-empresas y cárteles nacionales y extranjeros. El neoliberalismo, consagrado en la constitución política de 1980, tramposamente aprobada en un escandaloso fraude plebiscitario, ha entregado nuestras riquezas básicas a la voracidad de las grandes corporaciones extranjeras, comprometiendo nuestra independencia económica y política en favor de los imperios extranjeros, y terminado por concentrar de manera exorbitante e irracional el ingreso nacional en un puñado de clanes y magnates, sumiendo a la inmensa mayoría de la población en la pobreza, la explotación laboral, el endeudamiento, la inseguridad familiar, la desesperanza y la humillación.

  1. El sistema neoliberal sigue vigente en Chile a pesar que la dictadura abandonó el poder, por voto popular, hace ya tres décadas. Los gobiernos de las coaliciones de los partidos que se opusieron a la dictadura, si bien lograron suavizar levemente el sistema, no se atrevieron a atacar sus raíces; por lo tanto, la democracia verdadera y auténtica que vendría después de la larga noche dictatorial, no llegó jamás. La espuria constitución de la dictadura sigue en pie, y con ella el sistema neoliberal.
  2. Ante el alzamiento popular que vive el país, el presidente de la República Sebastián Piñera ha decretado una serie de medidas, que, al fin de cuentas, son pura demagogia o aspirinas para un enfermo que necesita una urgente intervención quirúrgica. Esto no nos extraña. Ninguna de estas medidas  toca, en absoluto,  los intereses de la clase económica dominante, la clase que Piñera no sólo representa, sino a la que pertenece. Por ejemplo, el aumento del salario mínimo será subvencionado por el Estado; vale decir, por todos los chilenos. Además, es evidente que el gobierno deberá endeudarse con la banca internacional para obtener esos fondos, lo que arrastrará al país a más endeudamiento y hasta una crisis inflacionaria de imprevisibles consecuencias. En otras palabras, el sistema neoliberal y la constitución política que lo consagra seguirán rigiendo totalmente en el país; por lo tanto, no habrá ninguna reforma tributaria que consiga morigerar las enormes desigualdades en el ingreso nacional.
  3. La rebelión sigue en marcha. Es verdaderamente popular y masiva, y no se detendrá hasta que se derogue la actual constitución política y se convoque a una Asamblea Constituyente de la cual surja una nueva y democrática Carta Magna, la que deberá contemplar no sólo el fin, y de raíz, del Estado subsidiario neoliberal, sino, entre otras materias, el establecimiento de una cámara única de representantes, el referéndum revocatorio si éstos no califican en su ejercicio, una mayor autonomía para las regiones y plebiscitos populares vinculantes tanto nacionales como regionales.

  1. Nuestro Colectivo se suma a la lucha del pueblo chileno por poner fin, de inmediato, a las Administradoras de Pensiones (AFP), un escandaloso fraude y estafa institucional que condena a la inmensa mayoría de nuestra población jubilada a la miseria, como asimismo de las Isapres, empresas que lucran de manera desmedida con la salud de la población. También nos sumamos al clamor popular por renacionalizar el cobre y hacer del Estado de Chile el dueño de todas las riquezas básicas mineras, forestales y marinas de nuestro país.
  2. Expresamos nuestro dolor por las muertes de decenas de chilenos que la represión ordenada por el gobierno ha causado con el solo fin de aplacar la legítima rebelión popular que vive el país.
  3. Finalmente, condenamos categóricamente los actos de bandidaje, incendios y saqueos que sobre todo el lumpen y la delincuencia organizada han causado a lo largo del país amparados en las protestas populares.

COLECTIVO “POR CAMBIOS DE VERDAD”

OCTUBRE DE 2019.

 

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