Mensaje de AFEPI en conmemoración de hallazgo de fosa de Pisagua

Héctor Marín Rossel, Presidente de AFEPI.

Familiares, autoridades, amigos, partidos políticos, agrupaciones sociales, compañeras y compañero que en este día nos acompañan a conmemorar 29 años del hallazgo de la fosa de Pisagua. Han pasado tantos años de lucha y denuncia permanente no solo de los familiares si no de las organizaciones sociales en plena dictadura cívico militar.

Como el Comité Permanente de Solidaridad, la Comisión de Derechos Humanos Capítulo Iquique, los abogados Ernesto Montoya, Germán Valenzuela, Carlos Vila… en lo jurídico. La tremenda labor realizada por Radio Iquique y la periodista Anyelina Rojas Valdés, en la prensa; así como también tantas y tantos compañeros y compañeras que de distintos frentes no ayudaron a mantener viva la memoria y poder encontrar la fosa de Pisagua un 2 de junio de 1990.

Labor fundamental de humanidad y compromiso por la verdad y la justicia, jugó el Juez de Pozo Almonte, Nelson Muñoz Morales junto al arqueólogo, Olaf Olmos y un puñado valioso de compañeros, llamados cariñosamente los paleros…. Fueron los testigos y actores presenciales del horror vivido por nuestros familiares durante su cautiverio en el campo de concentración de Pisagua.

Esta lucha no hubiese sido posible sin el apoyo constante de ustedes, en cada marcha, velatón, y querella, declarando y dando sus testimonios ante los Tribunales de Justicia, interminables veces… nuestro homenaje y agradecimiento a ustedes, sobrevivientes del campo de concentración de Pisagua.

Tras 29 años hemos venido denunciando, no solo ante los Tribunales de Justicia en Chile, sino que también ante la Comisión Interamericana de Derechos Humanos, donde ha sido condenado El estado de Chile, por denegación de justicia.

Hoy las causas falladas y con condenas por los asesinatos y/o desaparición de nuestros familiares, están en la Corte de Apelaciones de Santiago, desde el 30 de agosto del 2016, en espera de la ratificación de las condenas, dictadas por el Ministro Mario Carroza, para que los genocidas empiecen a cumplir sus condenas.

De parte de los aprehensores no ha habido ningún tipo de colaboración ante los Tribunales de Justicia para dar dar con el paradero de nuestros familiares detenidos desaparecidos; sigue el pacto de silencio con la complicidad del estado de Chile y los gobiernos de turnos. Desde 1990 hasta hoy, se mantiene la ley de amnistía, se mantiene la constitución del 80 de la dictadura cívico militar , se mantienen los privilegios a los asesinos, con condenas irrisorias, por matar, mentir, violar, torturar y hacer desaparecer a nuestros familiares , la mayoría de ellos con penas remitidas , o sea sin pasar un día en la cárcel.

Existe una impunidad crónica de víctimas y victimarios, los primeros sin una atención especial en salud, vivienda, con pensiones miserables y en espera de una reparación por las graves violaciones a los derechos humanos cometidas por el estado de Chile y sus funcionarios.

Nos enfrentamos a una grave crisis moral, política y económica, donde las instituciones no han funcionado, donde se naturaliza la tortura y la cultura de la muerte, siguen habiendo desaparecidos y asesinatos en plena democracia, en nuestra región y en otros lugares de nuestro país, se sigue interpelando al Estado de Chile a cumplir con los tratados internacionales en materia de derechos humanos.

Hoy más que nunca debemos levantar nuestra voz antes los gobiernos de turno y organismos internacionales, porque este es un problema de estado, y la falta de voluntad política y complicidad del propio estado de Chile y los poderes, ejecutivo, legislativo judicial y a las fuerzas armadas ha esta tremenda red de corrupción e impunidad que se mantiene y tiene a estas instituciones sumidas en esta tremenda crisis de credibilidad y confianza.

Este el escenario del Chile real, de injusticias a todo nivel por las que lucharon y perdieron la vida nuestros familiares, lucharon por sus ideales, por un Chile para todos, fieles al compromiso con el compañero Presidente y su programa.

Nada, ni nadie está olvidado.

Agrupación de familiares de ejecutados políticos y detenidos desaparecidos de Iquique y Pisagua.