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Daniel Ramírez G. / Ingeniero Comercial –  Economista El lucro es un concepto que se populariza en nuestro vocabulario a partir de la revolución de... Otra vez el lucro

Daniel Ramírez comDaniel Ramírez G. / Ingeniero Comercial –  Economista

El lucro es un concepto que se populariza en nuestro vocabulario a partir de la revolución de los pingüinos y a partir de allí, a todos les queda claro que lucro es la ganancia del capital, aquella que se logra no por el trabajo sino, porque  se posee capital. Quienes disponen de capital suficiente, pueden sentarse tranquilamente en un hotel 7 estrellas en medio oriente o en Mónaco, a esperar como se acumula el lucro. Quienes no lo poseen, tienen que trabajar para vivir.

El lucro se nos presentó bruscamente con la educación, lo comenzamos a sufrir diariamente con la salud y  ha terminado aplastándonos con las pensiones de hambre del sistema previsional.

Antes era algo natural en nuestras vidas el ver como la riqueza se compartía entre trabajadores y empresarios, pero en la medida que va pasando el tiempo y el círculo de explotación se va cerrando, el abusoque genera la impunidad cultural nos va incomodando y entonces comenzamos a tomar conciencia de que la riqueza que todos contribuimos a crear, se va acumulando en un solo lado, lo que nos lleva a la conclusión de que vivimos en un sistema injusto y sospechoso.

El tema de las pensiones de gendarmería llevó a la plaza a las AFP y la discusión que se debe abrir sobre el sistema previsional,mostrará en pelo el sistema de explotación implacable a que están sometidos los trabajadores por los dueños del capital.

No en vano hubo respuesta inmediata del gobierno, de las organizaciones empresariales y de los partidos de derecha, todos tratando de evitar que se hable sobre el tema, proponiendo medidas que podían haber tomado antes y tratando de establecer que si hay debate,  lo debe de haber en la cueva de Ali Baba, como llamó el flaco Lira al Congreso. Todos parecen estar de acuerdo en que es el sector privado el que debe de seguir haciéndose cargo del sistema previsional de los chilenos, para lo cual es indispensable el que este aparezca como un negocio atractivo. Es decir, el sistema previsional debe ser con fines de lucro y tiene que asegurar la generación de lucro.

La recomendación de la derecha para solucionar el problema coyuntural de las AFP, refleja la esencia del sistema, hacer de todo un buen negocio. Ellos recomiendan quitarle plata a la reforma educacional para ponerla en el sistema previsional. Doble negocio. Los Bancos tendrán más demanda de crédito de los estudiantes y se les dará más plata a las AFP.

El gobierno propone una AFP estatal dentro de la institucionalidad creada para las AFP. ¿Para qué otra igual? ¿Qué diferencia hace el Banco del Estado en el sistema bancario?

Las organizaciones empresariales aceptaron que los empresarios debían aportar al fondo de pensiones, pero que esto debía ser gradual. Claro, el Estado es uno de los que más aporta y siempre paga, en cambio, según la tercera del dia 13-8-16, existen más de 1 millón de juicios por no pago de imposiciones de parte de las empresas, equivalente a más de 2600 millones de dólares. ¿Por qué el empresariado no  empieza por pagar las deudas?

Actualmente las AFP administran más de 170.000 millones de dólares que han sido descontados, dia a día, durante décadas, de los sueldos de los trabajadores. Estos fondos han sido invertidos en acciones y bonos de empresas nacionales y extranjeras, es decir, no podríamos tener una visión más clara de que es el trabajo el origen del capital y que el  lucro no es sino una expropiación de parte de ese trabajo.

Las AFP no son sino el reflejo institucional, de lo que históricamente ha sido la formación del capital que hoy gobierna el planeta. Durante toda la historia humana conocida, se ha ido despojando a los trabajadores de parte de su salario para formar lo que ahora conocemos como capital. Las AFP son la fotografía más clara de ello.

La lucha contra las AFP es la más importante que ha iniciado el pueblo de Chile y hay que hacer lo imposible porque llegue a buen destino.

 

 

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