Sesenta abuelitos de Hogares Aguilas Blancas y San Vicente de Paul, retornaron a hospederías
Crónicas 17 septiembre, 2015 Edición Cero
Un total de 60 abuelitos residentes en los hogares «San Vicente de Paul» y «Aguilas Blancas», retornaron temprano, esta mañana de jueves 17 de septiembre, a dichos recintos, luego que la alerta de tsunami fuera bajada por el SHOA. Hay que recordar que tras el terremoto en la IV Región y ante el riesgo, los abuelitos fueron evacuados.
La evacuación se decidió durante el Comité Operativo Emergencia de Tarapacá, que presidió la intendenta Claudia Rojas, operativo que hicieron efectivo, personal de Bomberos, con el apoyo de las Fuerzas Armadas.
La seremi de Desarrollo Social de Tarapacá, Mariela Basualto, destacó el trabajo intersectorial desplegado en esta operación, así como el desempeño de Senama y el municipio de Iquique para brindar la atención a los adultos llevados a la zona de seguridad.
“Hay un trabajo mancomunado, donde destaca el municipio, los organismos de seguridad y Salud, juntos al Ejército y Fuerza Aérea para que las personas mayores no se vieran afectadas. A ellos se les hizo chequeo y los casos que requirieron se derivaron al Hospital, por efecto de descompensación”, destacó Mariela Basualto.
El director regional del Servicio Nacional del Adulto Mayor, Luis López, destacó que en el recinto se brindó a los adultos prestaciones médicas y de trabajo coordinado con los encargados de los hogares, los que atienden a personas en estado de vulnerabilidad. Precisó que dos adultos mayores, que no pertenecen a hogares de ancianos, llegaron hasta el lugar, siendo atendidos.
La directora del hogar San Vicente de Paul, Jaqueline Gallegos, destacó el apoyo brindado a los adultos mayores, seis de los cuales se encuentran postrados, mientras que el resto son semivalentes y valentes. “Se hizo la coordinación con la seremi, Senama y Bomberos para evacuar a los adultos la noche del miércoles y el operativo se hizo bien, apoyándonos además el Ejército”, manifestó.
Dijo que lo importante es que los adultos mayores no sufrieron problemas y la evacuación preventiva también permitió trabajar para una situación de contingencia, como la vivida en Iquique el 2014.