Colegio de Profesores Tarapacá por caso de profesora acosada y agredida en Antofagasta, llama a asumir responsabilidades institucionales

Arline Oros, Presidenta Regional del Colegio de profesores Tarapacá.

A una semana de la muerte de la profesora de inglés Katherine Yoma, docente de un colegio de Antofagasta, quien  tomara la drástica decisión de poner fin a su vida, producto de acoso  de una alumna y una apoderada del establecimiento educacional, el Colegio de Profesores de Iquique, Regional Tarapacá, insistió en la necesidad de abordar el tema para prevenir casos extremos como éste, llamando a las instituciones comprometidas, a asumir su responsabilidad.

El comunicado lo suscribe el gremio, firmado por la Presidenta Regional, Arline Oros y la Presidenta Comunal, Gloria Molina, a nombre de los respectivos directorios.

Lo ocurrido en Antofagasta, pone en evidencia lo que ocurre en el sistema educativo, reflejando las » difíciles condiciones de trabajo que enfrentan las y los docentes que deben lidiar con situaciones de violencia de apoderados, directivos, alumnos y de parte de sus pares», señala el documento.

DECLARACIÓN COMPLETA

El Colegio de Profesoras y Profesores de la región de Tarapacá lamenta lo acontecido con la profesora de Antofagasta, docente de inglés, Katherine Yoma (Q.E.P.D), docente de la Escuela D-68 quien fuera víctima de acoso y agresiones por parte de una alumna y su apoderado en el establecimiento donde ella impartía clases. La extrema decisión de nuestra colega muestra las difíciles condiciones de trabajo que enfrentan las y los docentes que deben lidiar con situaciones de violencia de apoderados, directivos, alumnos y de parte de sus pares.

A través del tiempo los sostenedores al no contar con las herramientas para evitar situaciones de acoso laboral y violencia escolar optan por cambiar de establecimientos a los y las docentes que sufren de estos acosos y muchas veces lo único que hacen es cambiar al profesor victimizado, dejando al victimario para que siga cometiendo los ilícitos. Debido a esto hemos solicitado en reiteradas ocasiones que se realice un estudio de las licencias médicas, para ver cuáles son las raíces de ellas. Sabemos que muchos docentes para no perder su fuente laboral, no lidiar con la problemática y cuidar su salud mental se les hace imperioso recurrir a la licencia médica, originando que no se aborde la problemática en su profundidad.

Llamamos a asumir las responsabilidades de todas las instituciones que fallaron en dar apoyo a lo denunciado por nuestra colega Katherine Yoma. Es necesario, entonces, la creación de protocolos que salvaguarden nuestra integridad física y emocional y que se consideren las situaciones de acoso y abuso sexual, como así también se sancione el acoso laboral y las agresiones y amenazas al interior de una comunidad educativa. Estos protocolos deben ser trabajados, elaborados y visados para que sean aplicados de forma inmediata. También es necesario hacer cumplir la ley en lo referente a materia de acoso y maltrato contra las y los docentes.

Solicitamos creen una mesa de trabajo en conjunto con las diferentes instituciones que forman parte del sistema educativo y que además considere a las organizaciones y gremios de la educación.

El Estatuto docente en su artículo 8° bis, que obliga a los sostenedores a garantizar a los docentes “un ambiente laboral tolerante y de respeto mutuo. Del mismo modo tienen derecho a que se le respete su integridad física, psicológica y moral, no pudiendo ser objeto de tratos vejatorios, degradantes o maltratos psicológicos por parte de los demás integrantes de la Comunidad educativa” (Ley 19.070).

Con profundo pesar hacemos sentir nuestra solidaridad con la familia de nuestra colega Katherine Yoma y a sus familiares, a las profesoras y profesores, asistentes de la educación y a padres y apoderados que desde un principio denunciaron lo que estaba ocurriendo con la colega y no fueron escuchados.