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Una declaración conjunta emitieron las dos asociaciones de funcionarios y funcionarias del Instituto Nacional de Derechos Humanos, ANDEDH y AFFINDH, con la finalidad de... Funcionarios del INDH señalan que Ley Naim-Retamal es un retroceso en materia de DDHH y se declaran en estado de alerta

Una declaración conjunta emitieron las dos asociaciones de funcionarios y funcionarias del Instituto Nacional de Derechos Humanos, ANDEDH y AFFINDH, con la finalidad de establecer su postura frente al actual contexto sociopolítico que se vive en Chile, principalmente por la promulgación de la Ley Naín Retamal, constatando un retroceso en materia de derechos humanos.

Los trabajadores, llaman a el Instituto Nacional de Derechos Humanos,  «que pronuncie frente a los estándares internacionales en materia de DDHH y que se apegue al mandato de defensa y protección de los derechos humanos de todas las personas que habitan el país».

A la vez, en su calidad de defensores de derechos humanos, se declaran en alerta «activando las redes de solidaridad nacional e internacional, denunciando ante los sistemas de protección de derechos humanos el frágil momento que enfrentamos como defensoras y defensores de DDHH. Hacemos el llamado a todas y todos a articularse y movilizarse».

DECLARACIÓN

Puedes revisar acá, la declaración completa

Las asociaciones de funcionarias y funcionarios del Instituto Nacional de Derechos Humanos, ANDEDH y AFFINDH, declaran lo siguiente:

1.- Como trabajadoras y trabajadores de DDHH no podemos quedar ajenos ante al actual contexto sociopolítico, de populismo penal y legislativo, que tiene como correlato el menosprecio de los derechos humanos y falta de protección por parte del Estado.

2.- En el ejercicio de nuestras funciones, desde el año 2010, hemos recogido miles de relatos de víctimas de graves violaciones a sus derechos humanos: mujeres, niñas y niños, pueblos originarios, personas migrantes, personas LGTBIQ+ y personas ejerciendo su legítimo derecho a protestar y manifestarse. Durante el estallido social en el año 2019 muchas/os de nosotras/os vivimos la violencia de las vulneraciones de derechos, al observar y ser testigos directos del comportamiento de agentes del Estado, contener a víctimas e interponer las acciones judiciales respectivas que escasa justicia han

3.-Hoy con la promulgación de la Ley Naín Retamal constatamos un retroceso en materia de DDHH, donde el riesgo de la impunidad es muy alto, al propiciar un escenario favorable para que las víctimas de violaciones a los derechos humanos queden sin justicia, sin reparación y donde no hay espacio para las garantías de no repetición. Vemos con desazón que la defensa de derechos se viene a cuestas, con una legislación donde el Estado ofrece menos garantías para su protección. Es un claro deterioro en la democracia y una mala noticia para la paz

El Estado debe garantizar la seguridad de las personas, pero dentro de un marco de respeto a los derechos humanos, y no cediendo frente a medidas que pueden tener un alto impacto en la población.

4.-El retroceso en el respeto y garantía de los DDHH está siendo vertiginoso, la medida anunciada por la Fiscalía de Chile de solicitar la prisión preventiva a todas las personas extranjeras no regularizadas representa una medida discriminatoria y desproporcionada, atentando contra sus derechos, frente a esto no podemos callar. El eco que han hecho los medios de comunicación hegemónicos del anuncio es El solo hecho que personas migrantes (familias, niños, niñas) estén en situación irregular, no puede acarrear prisión preventiva, eso compromete la responsabilidad del Estado en materia de derechos humanos.

5.- Llamamos a que el Consejo del INDH se pronuncie frente a los estándares internacionales en materia de DDHH y que se apegue al mandato de defensa y protección de los derechos humanos de todas las personas que habitan el país. En este grave contexto no puede guardar silencio, debe activarse y monitorear el comportamiento del Estado en su conjunto. Por otra parte, tiene el deber de cuidar a sus equipos trabajando por la defensa de los derechos en distintos frentes, generando alertas tempranas para el desempeño de las funciones habituales. Es fundamental incorporar los aprendizajes del estallido y cuidarnos entre todas y todos.

6.- Nos declaramos en alerta, activando las redes de solidaridad nacional e internacional, denunciando ante los sistemas de protección de derechos humanos el frágil momento que enfrentamos como defensoras y defensores de DDHH. Hacemos el llamado a todas y todos a articularse y movilizarse.

 

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