Fallece el cantautor iquiqueño Luis «Checho» González a los 89 años
Crónicas 13 diciembre, 2022 Edición Cero
Diario El Tarapacá.- Comunicamos el sensible fallecimiento del cantautor Luis «Checho» González a los 89 años durante la madrugada del 13 de diciembre de 2022 en su ciudad natal de Iquique junto a su familia.
Don Checho tuvo una importante trayectoria musical desde la década de 1950 participando en distintos grupos, del cual el más conocido fue «Los González». En 1967 crea los premios «Dragón de Oro» y «Boya de Oro». En 2002 y 2003 realizó un Festival del Adulto Mayor y también realizó actos de beneficencia por los más necesitados, haciendo clases de guitarra gratuitas. Durante el accidente de la mina San José en 2010, acudió al campamento Esperanza donde dijo haber tenido la revelación de que todos estaban vivos antes que las señales estuvieran para afirmarlo. Checho González fue un católico practicante y afirma haber sido una herramienta de Dios para curar a personas con imposición de manos, incluso a una persona en silla de ruedas quien afirma que pudo caminar. El cantautor también rindió homenaje a Felipe Camiroaga, Alexis Sánchez y a las víctimas Alto Hospicio, por lo que su labor social estuvo presente hasta el final de sus días. Para saber más vea el artículo biográfico sobre Checho acá.
Checho González no tenía una postura política ni militaba en un partido, sin embargo, también realizó canciones relacionadas a la política como al alcalde de centro-izquierda Jorge Soria y a Iván Barbaric Sciaraffia y la más conocida a Augusto Pinochet Ugarte.
La canción conocida popularmente como «Mi General Augusto Pinochet» se encontraba subida a YouTube desde 2008. El año 2017 el usuario DeroVolk dedicado a subir marchas de toda índole (iquiqueño y residente en el extranjero) subió la canción con el título con el que se le conoce hoy, sin conocer el autor de la misma. La canción empezó a viralizarse teniendo millones de visitas a nivel mundial, siendo subtitulada y traducida a distintos idiomas y convirtiéndose en el himno del pinochetismo.
Desde el año 2020 el equipo del Diario El Tarapacá logró digitalizar álbumes y canciones de Checho con la colaboración de su familia, en especial su hermana Nancy, y amigos como el narrador de la mencionada canción Rafael Martínez Barberi. Hoy estas pueden ser encontradas en Spotify y YouTube.
En julio del presente año pudimos visitar al cantautor quien aún recordaba canciones y anécdotas de su vida, destacando que viajaba por distintos países, que fue famoso, su rol social y los dones curativos que siempre atribuía a Dios y no a sí mismo.
Bernardo Guerrero lo destaca en el libro «Del Chumbeque a la Zofri, Los aromas de nuestra identidad cultural» citamos:
El cantautor de Iquique se llama Luis González, pero todo el mundo lo conoce como Checho González. Es autor de más de mil canciones. Recorre el vals y el bolero, y de vez en cuando le hace a la cumbia como aquella dedicada al Campeonato Mundial de Caza Submarina, en la que Raúl Choque y los iquiqueños conocieron la gloria. El grupo Altura la recrea en un montaje teatral. Desde que empecé a escuchar música y eso es desde cuando crecí (mi padre tenía una radio en la esquina del living donde la Lynch transmitía El Carrusel Infantil y El Capitán Silver) la voz del Checho Gónzalez me es familiar. Fundador de esa institución llamada Dragones de Oro, el cantautor de Iquique tiene su propio estilo y profesa esa rara profesión que consiste en otorgar premios a los destacados. Una especie de Grammy de la cultura son los Dragones de Oro. Tuve el privilegio de recibir uno, y la desgracia de no asistir. Fundó además su sello discográfico que, como no, se llamaba Dragón. Creador de una crónica en tiempo de vals, con la canción a Rubén Godoy, nos recuerda que se puede ser campeón y recibir una cuchillada a cambio. El destino como tragedia que parece perseguirnos a los hijos de los Arturos: de Godoy y de Prat. Un aire a Borges y a milonga tiene ese vals. Cada canción de este poeta de Iquique, popular y comprometido. nos recuerda a la caleta de ayer, al puerto de hoy y al mall de mañana: la droga con su discurso, la pampa con su nostalgia y la zofri con sus baratijas. El día que le entreguemos El Dragón de Oro, una especie de Doctorado Honoris Causa por su aporte a nuestra identidad, Checho González podrá caminar tranquilo por su ciudad. Tendrá que esperar ya que le queda mucho por andar. Entonces a lo mejor habría que grabarle un CD con sus temas, financiado por la Ilustre Municipalidad. (¿Estaré soñando Checho con ese día, o es mi ingenuidad que me hace la típica zancadilla?). Pero, el que nace cantor muere cantando. Y con CD o sin él, nuestro cantautor avecindado en el Pueblo Nuevo (con amigos como el Rolo López en el Matadero, quien entre fotos de toros y autorretratos tiene al Checho con su guitarra), con raíces morrinas puede seguir llevando por el mundo entero sus crónicas de esta aldea. Gracias Checho.
Bernardo Guerrero, Del Chumbeque a la Zofri, Los aromas de nuestra identidad cultural