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Claudio Vila Bustillos/ Gobernador Provincia del Tamarugal Mirar el Tamarugal hoy, es mirar una paradoja que duele: la provincia tiene enormes riquezas tanto naturales como... La Provincia del Tamarugal ante el desafío del desarrollo

CLAUDIO VILA cOLUMNAClaudio Vila Bustillos/ Gobernador Provincia del Tamarugal

Mirar el Tamarugal hoy, es mirar una paradoja que duele: la provincia tiene enormes riquezas tanto naturales como culturales, y sin embargo mantiene enormes carencias, como falta de servicios públicos, déficits en vivienda, en salud y escasa oferta educativa. Esto redunda en fenómenos preocupantes, como el despoblamiento de importantes sectores de la provincia, así como falta de oportunidades para nuestros jóvenes.

Si no evitamos que los jóvenes, que los nuevos talentos que surgen en la provincia emigren en pos de un mejor futuro, no habrá desarrollo para estas tierras azotadas por la historia. El futuro del Tamarugal se escribe en los sueños de sus hijos.

El desafío en el que nos hemos abocado como Gobernación, es estructurar un proyecto u horizonte estratégico que guíe la acción de todos los actores de la provincia, tanto públicos como privados, en función de reunir las capacidades necesarias para superar las brechas que ahogan al Tamarugal. La apuesta fue identificar juntos, cuáles son los problemas a superar y de qué manera afrontarlos.

Este desafío tuvo un gran instrumento articulador: el Comité Técnico Asesor del Gobernador del Tamarugal. Una instancia creada a mediados de la década del ’90 para coordinar y supervisar la gestión de los servicios públicos en el territorio, pero que a partir de este año se planteó un desafío que desde Tamarugal veníamos demandando: construir, participativamente, un modelo de desarrollo que fuera endógeno y sustentable.

Esto se enmarca en una nueva lógica de gobierno, que busca por un lado avanzar en la “provincialización” de la política pública, mientras que por otro el incorporar a la ciudadanía al diseño, ejecución y fiscalización de esa política. La primera premisa se basa en el hecho de que la provincia, por su más profundo enraizamiento en la historia de Chile, expresa de mejor manera la dialéctica entre población y territorio, por lo que es posible hacer una política más precisa y ajustada a la realidad local.  La segunda premisa en tanto, se basa en una voluntad enfáticamente orientada por la Sra. Presidenta, Michelle Bachelet: hacer que la población sea parte activa y no mero espectador de las acciones de su gobierno.

Construir un nuevo horizonte desde y para el Tamarugal

Es así como iniciamos un proceso de casi cinco meses, en que reunimos a los servicios públicos (Serviu, Indap, Subdere, Sename, etc.), junto a los municipios de Huara, Pica y Pozo Almonte; ambas policías, juntas de vecinos, clubes de adultos mayor, la universidad Arturo Prat, ONGs, asociaciones de inmigrantes, Cámaras de Comercio comunales y Defensa Civil, entre muchos otros, para pensar juntos el Tamarugal que queremos y los mecanismos para lograrlo.  La reflexión fue rica y la discusión intensa. Los frutos de este proceso, es el que intentamos sintetizar en el presente documento.

En términos generales, podemos destacar el centro del debate: avanzar hacia un modelo de desarrollo que sea sustentable, endógeno y participativo.

Desarrollo entendido no sólo como crecimiento económico, sino como realización humana, que incorpora pero supera con mucho la provisión de bienes materiales. Sustentable, porque no es posible construir desarrollo si se destruye la naturaleza o se deteriora la calidad de vida de las personas, por eso la sustentabilidad es tanto ambiental, como social. Endógeno, porque este proyecto debe generarse por y para las personas de este territorio, no por un chovinismo estrecho, sino porque la experiencia indica que nadie mejor que quienes viven en un espacio, puede pensar y gestionar su propia superación. Y participativo, porque es indispensable generar un espacio donde sintetizar la multiplicidad de talentos y capacidades que están repartidas en la sociedad. Todos tienen algo que aportar, todos somos necesarios.

Siete ejes de desarrollo:

Este horizonte estratégico, unido a la caracterización de las brechas y potencialidades del Tamarugal, nos permitió definir siete ejes de desarrollo, a saber:

1.- Turismo de intereses especiales: la provincia ostenta un importante patrimonio tanto natural como cultural que puede ponerse en valor. Una costa con potencial para los deportes acuáticos, quebradas, salares, fauna endémica principalmente en la zona cordillerana y pre-cordillerana, destacan en lo natural. En el plano cultural, la herencia prehispánica, el período del salitre, la guerra civil o la represión y las violaciones a los derechos humanos, sin duda ofrecen un rico patrimonio histórico que debe mostrarse al mundo. La industria turística en este caso ofrece enormes potencialidades, ya que se trata de un sector económico sustentable, que debe hacer desde nuestras riquezas y nuestra gente y es inclusivo porque permite a amplios sectores de la población recibir sus beneficios.

2.- Generación de valor agregado en la industria minera: Si se quiere dar un salto al desarrollo, es indispensable superar la fase primario-exportadora que ofrece la industria minera en la provincia. Es indispensable asociar a la minería industria que puedan generar mayor valor agregado y con ello, la generación de mayores encadenamientos productivos, lo que se traduce en más y mejores empleos. Esto sin duda es un proceso complejo, que requiere importante inversión en capital humano e infraestructuras. Pero un viejo dicho nos enseña que “hasta las torres más altas empiezan en el suelo”, es decir, el futuro que queremos lo empezamos a construir hoy. En este sentido, la reflexión del CTA apuntaba, por ejemplo, a apoyar la generación de una industria de reciclaje de residuos vinculados la industria minera, lo que no sólo tiene impactos económicos directos, sino también medioambientales.

3.- Energías Renovable No Convencionales (ERNCs): Dar mayor sofisticación a la producción local, sin duda va a requerir una mayor oferta energética, a precios competitivos, y amigable con el medio ambiente. En este sentido, Tamarugal tiene un enorme potencial para el aprovechamiento de la energía solar, eólica y geotérmica. De hecho, en lo últimos años se han ido instalando importantes proyectos, los cuales es necesario multiplicar y diversificar.

4.- Servicios e inversión pública: Una de las principales conclusiones del CTA fue la necesidad de que la provincia contara con más y mejores servicios públicos. Destacó la necesidad de ampliar la infraestructura en salud, en la perspectiva de contar en la provincia con una red asistencial que pueda cubrir necesidades más complejas y que pueda cubrir más territorio. Asimismo, se plantea la necesidad de mayor inversión en vivienda, alcantarillado, electricidad, conectividad tanto física como en telefonía e internet. En definitiva, contar con los servicios suficientes como plataforma de desarrollo.

5.- Capital humano e I+D: Más productividad y generación de valor agregado pasa necesariamente por inversión en formación de capital humano, así como por el desarrollo de investigación científica destinada a optimizar los procesos productivos. Necesitamos formar más y mejores técnicos y profesionales en función del marco estratégico aquí reseñado. Necesitamos también realizar más investigación en esas mismas áreas, (turismo, industria minera, agropecuario, energía, etc).

6.- Transnacionalización e integración: Otra conclusión importante, es la que podemos sintetizar en la siguiente idea fuerza: Para que Tamarugal se desarrolle, debe saltar de la pecera, es decir, salir de los estrechos marcos de su frontera político-administrativa y de la mano con Iquique, proyectarse hacia América Latina. Las posibilidades de diversificación y sofisticación productiva de la provincia necesitan de una demanda importante, por lo que debe desde el principio asumir una vocación exportadora. El mercado externo más probable para productos con mayor valor agregado está en los países vecinos, de similar nivel tecnológico; y no en las grandes economías industrializadas como Europa o EE.UU. que compran fundamentalmente materias primas. Asimismo, proyectar todo su potencial turístico requiere una oferta turística más rica, que pueda unir atractivos más allá de la frontera, aprovechando la posición privilegiada de Tamarugal de puente entre el pacífico y América Latina. Un ejemplo elocuente es el proyecto de ruta Iquique-Pica-Uyuni.

7.- Desconcentración y empoderamiento local: Finalmente, una queja recurrente durante el proceso de discusiones, terminó en propuesta: avanzar en la descentralización del país y la desconcentración de la región. Dotar de poder de decisión, planificación y ejecución mayores a las administraciones más pequeñas y cercanas al territorio, se considera ayudan mejorar la gestión. Esto en el entendido que son quienes habitan los respectivos territorios, quienes están en mejores condiciones que gestionarlo, al tener un mejor conocimiento del mismo. En síntesis, más poder local para una mejor gobernanza.

Finalmente señalar que este documento no es, ni puede ser, la cristalización definitiva de las perspectivas de desarrollo de nuestra provincia. Por el contrario, su vocación es la de ser el punto de inicio para una reflexión que debe continuar, un debate que debe persistir, y una fiscalización activa de las medidas que de este documento emanen. Esta es la única forma de avanzar, moviéndose activa e inteligentemente en las siempre agitadas aguas de la realidad.

Tamarugal puede y debe ser mejor. Esa es la promesa del proceso de reflexión colectiva del CTA y ése es el desafío que como gobierno, nos hemos comprometido junto a la ciudadanía.

Por último comentar que las síntesis de este trabajo, está publicado en nuestro sitio electrónico, en el link http://www.gobernaciontamarugal.gov.cl/media/2015/09/CTA-2015.pdf

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