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Acusados de robo con violencia, dos jóvenes trabajadores pasaron  7 meses en el penal de Alto Hospicio, en prisión preventiva, pero el Tribunal cuestionó... Insólito: Después de estar 7 meses en prisión se comprobó que 2 jóvenes trabajadores eran inocentes

defensora Marta VallejosAcusados de robo con violencia, dos jóvenes trabajadores pasaron  7 meses en el penal de Alto Hospicio, en prisión preventiva, pero el Tribunal cuestionó las pruebas usadas en el caso. “Todo se resumía en un reconocimiento errado”,  explicó la  Defensora penal pública Marta Vallejos

 Mediante un comunicado, la Defensoría Penal informó:

 “La prueba fiscal fue insuficiente para instituirla al concurrir una serie de elementos negativos, divergentes y dubitativos que impiden razonablemente formar certeza, manteniendo la imputación en un estado de duda, que obsta arribar a la decisión condenatoria”. Con esos exactos términos el Tribunal Oral en lo Penal de Iquique fundamentó la absolución de dos jóvenes trabajadores acusados de robo con violencia, luego que pasaran más de 7 meses en prisión preventiva en el penal de Alto Hospicio.

Tal valoración la realizaron los jueces Moisés Pino, Marilyn Fredes y Franco Repetto, luego de conocer los antecedentes que los acusadores y la defensora penal pública expusieron en torno a este caso, cuya ocurrencia se fija en la madrugada del 15 de diciembre del año pasado. La acusación intentaba establecer que Angelo M.L. y Cristian G.B. habían asaltado a Juan. C.P. para quitarle un celular y 10 mil pesos, por lo cual lo golpearon con una botella y luego ingresaron a una fiesta familiar de los alrededores, en donde se cambiaron de ropas, todo esto a la vista de un guardia municipal que vigilaba el parque en donde habrían ocurrido los hechos.

Pero los jueces destacaron que la víctima tuvo un intercambio de palabras con sus atacantes, mas no percibió que alguno fuera tartamudo notorio como uno de los imputados. También resaltaron que la víctima dijo reconocerlos en estrado pero sólo porque un policía se los mostró – la madrugada en que los detuvieron – afirmando que ellos eran sus victimarios, lo que él creyó aunque antes no se había fijado en sus rostros.

Los magistrados también cuestionaron la versión del guardia municipal que afirmó reconocerlos porque los había visto esa noche a unos 50 metros de distancia, y que no les perdió de vista hasta que entraron a una fiesta familiar desde donde salieron con otras vestimentas para volver al parque en donde los detuvo Carabineros. Tal objeción fue generada porque los vecinos que mantenían una fiesta declararon enfáticamente que nadie extraño ingresó a la casa esa madrugada y porque el vigilante afirmó que uno de ellos era de contextura gruesa, cuando en el estrado los dos acusados lucían claramente delgados.

“Esta causa tenía mucha importancia porque ambos jóvenes no contaban con antecedentes penales, vivían con sus padres y en todo momento sostenían su absoluta inocencia, insistiendo también en que no tenían ninguna necesidad de robar porque tenían trabajo estable, su propio dinero, sus propios celulares”, explica la defensora penal pública Marta Vallejos. La profesional detalla que “desde los inicios de la causa mantuvo la teoría de la falta de participación, se presentaron revisiones cautelares, se recurrió a la Corte de Apelaciones; pero recién al final del camino se logró convencer al Tribunal de la inocencia de ambos jóvenes y que todo se resumía en un reconocimiento errado”.

“Al final, ellos estuvieron en el  lugar equivocado, en el momento equivocado y en torno a ambos se armó una acusación basada en hechos contradictorios y erróneos”, concluyó.

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