Destacada escritora iquiqueña Sonia Pereira Torrico presentó su tercer libro, «Nuevas Historias Bajo el Cielo de Iquique»
A 50 años del golpeCrónicas 3 diciembre, 2024 Edición Cero
Una gran ceremonia al estilo iquiqueño, resultó ser el lanzamiento del tercer libro de la escritora iquiqueña, Sonia Pereira Torrico, (Plumita iquiqueña) cuyo título es «Nuevas Historias Bajo el Cielo de Iquique» y que quedó plasmado en un set de fotografías de la dupla de académicos de la UNAP y fotógrafos, Pamela Daza y Hernán Pereira.
La autora, es hija de quien fuera un destacado iquiqueño, vinculado al mundo de las comunicaciones y el deporte, ya fallecido, Iván Pereira Palomo, a quien le envió sus saludos al cielo.
Ambos participaron en toda la jornada de lanzamiento de la obra de Sonia Pereira y nos compartieron el discurso presentado en la ocasión. «Discurso donde nos cuenta de qué trata la nueva publicación, los personajes, lugar e inspiración que la llevaron concretar esta tercera publicación».
La presentación del libro, la realizó la comunicadora Pilar Balaguer Jara, quien mantiene una estrecha relación con la autora. Destacó las cualidades creativas y humanas de Sonia Pereira, con la que la une una larga amistad. «Lleva la escritura en la sangre, le corre por sus venas», dijo.
Recordemos que el lanzamiento del libro, fue hace algunos días el Club Rápido ante una numerosa audiencia.
EL DISCURSO DE LA AUTORA
Compartimos el discurso de la escritora iquiqueña, Sonia Pereira, presentado en el lanzamiento de su tercera obra.
Buenas tardes amigos y amigas de Iquique:
Me siento en casa, pareciera que estoy en el living de mi hogar. Muchas gracias por venir a acompañarme en el nacimiento de este nuevo libro, un viaje que no termina, un viaje por la nostalgia iquiqueña, aquellos recuerdos que tenemos grabados en nuestra mente y en el corazón. Todos los que estamos acá, somos unos románticos, añoramos momentos de nuestros barrios, carnavales, playas, la chaya, ir al estadio antiguo de Cavancha, gritar la de atrás, la de atrás por los tumbos de Cavancha, etc.
Existe una frase muy repetida, “todo pasado fue mejor”, pero la pregunta; ¿Y por qué este presente no lo puede ser? Es maravilloso volver con el Longino celestial a los 50, 60, 70 y 80, pero seamos positivos, hasta el día de hoy se mantienen y conservan instituciones como el lonche, los carros alegóricos, el tira pastilla viejo “cagao”, las fiestas religiosas, los carnavales, la chaya, la fiesta de San Pedro y San Pablo, el 21 de Mayo, el homenaje a Concha y Volados, el bronce estremecido en la Tirana, en el tierra de campeones, en un cumpleaños, un matrimonio o una celebración de la Patrona de los músicos, Santa Cecilia.
Es tan importante que las generaciones de hoy conozcan el origen de las tradiciones actuales, que los niños sepan el origen de los carros alegóricos, del lonche, del himno de Iquique y del glorioso a través de los tiempos peruanos, chilenos, éxodo pampino, las banderas negras, el auge pesquero, la instalación de la ZOFRI y el desarrollo de la minería.
Dicen que las segundas partes nunca son buenas, en este caso, les confirmo que sí, toda vez que en este pedalear por el Iquique de mi vida, me acompañan ustedes mis amigos, mi familia, y personajes tan queridos e inofensivos como el Pate Cuete y el Chicote.
Me detengo acá en este momento, porque la historia del Chicote la encuentro notable, se hizo pasar por muerto en confabulación con la Banda del Litro. El tipo iba en un camión por calle Tarapacá con Vivar y de repente, mientras toda la comunidad lloraba a moco tendío, el Chicote se levanta. Los gritos y el asombro estaban a la orden del día.
También quiero contarles que en este libro quise rescatar la narrativa oral de gente valiosa que vive con nosotros, cuyo historial no podía dejarlo en una mera conversación. Son muchos, pero voy a destacar en esta oportunidad a la niña de la oficina Mapocho, Carmencita Capetillo, el músico y tradicionista Juan Álvarez.
Existen otros que se nos fueron como el Doctor Reyno, Bertita Guzmán; la inolvidable vecina del barrio Manuel Rodríguez y matriarca de la reconocida Familia Álvarez y por último, quiero hacer un homenaje póstumo a quien fue mi amiga, mi nanita en mis tiempos de juventud, amiga de mi mamá Sonita y madre de uno de mis mejores amigos, Domingo Rodríguez Valdés. Está señora Coloraína, poto verde, vendedora de pescado, presidenta de cuanta sociedad religiosa y social hubiese.
Ella tenía un corazón noble, quería en lo más profundo de su corazón dejar un legado y huellas en el puerto de Iquique. Un besito al cielo Yoyita linda, un abrazo inmenso para ti amigo del alma. Ella estuvo presente en la presentación del primer libro, Mis Historias Bajo el Cielo de Iquique, el año 2019.
Entonces, insisto y con esto termino para dar paso a una linda sorpresa. Es fundamental como misión desde la literatura, rescatar la narrativa oral y escribirla para que las futuras te generaciones sepan que la historia la hacen hombres y mujeres, construyendo, edificando un modo de vida, una identidad, esto tan hermoso que señala el poeta Pedro Marambio… la NORTINIDAD
Quiero agradecer a casa uno de ustedes por venir, hay plumita para rato, escribir es mi pasión, y escribir la vida del glorioso es viajar por los aeropuertos del alma y volver a la mesa larga, esa que invoca todas mis nostalgias.
Un besito a mi papá Iván que está dirigiendo en el cielo. A mí hermosa madre Sonita, a mi prima Vanessita, a mi abuelita Berta y todos los que han partido.
Abrazos miles… ¡Viva Iquique!
LA CEREMONIA EN IMÁGENES