
Carlos Graña Sarmiento, periodista.
El Tratado Integral y Progresista de Asociación Transpacífico TPP-11, es un acuerdo comercial que involucra a 11 países y su objetivo es contribuir al crecimiento económico. Se señala, que fue creado para contribuir al crecimiento económico y crear nuevas oportunidades para empresas, trabajadores, agricultores y consumidores . Se indica también que va más allá de reducción de costos para las empresas: Incluye compromisos para salvaguardar altos estándares laborales y ambientales en toda la región del Asia Pacífico. Reúne a 502 millones de personas. Es decir el 13% de la actividad económica mundial.
Otros analistas sostienen que fue impulsado por Estados Unidos para contrapesar al creciente poder de China. El Presidente de Estados Unidos Barack Obama, el 2016, señaló, que China no debe redactar las reglas regionales de comercio; sino Estados Unidos. Sin embargo, su sucesor Ronald Trump no continuo la política de estado, y retiró, en el 2017 , a Estados Unidos de ese tratado, argumentó que es necesario proteger a la industria americana y sus mercados en su país y el mundo. El nuevo gobierno de Estados Unidos, presidido por Joe Biden, no ha integrado a Estados Unidos a este bloque comercial, considerado uno de los más grandes del mundo.
Sin embargo, el 16 septiembre del 2021, en medio de la pandemia que afecta a la humanidad y que dañó las economías del mundo, China sorprendió al mundo al pedir que sea incorporado a este tratado, tal como lo hiciera el Reino Unido, que espera ser aceptado en el magno bloque económico, que integran las economías del Asia Pacífico. China tiene territorios en la Cuenca del Pacífico, donde están las economías más grandes del planeta. De manera, que no existe ninguna razón para excluirla, además a firmado acuerdo comerciales con varios países, que suscribieron este Tratado entre los que se encuentra Chile. Estados Unidos aún sigue fuera del Tratado, que contribuyó a crear.
En Chile, el TPP11 está en espera, que el Senado chileno lo ratifique, para que sea aprobado y entre en vigencia . El Acuerdo consta de 30 capítulos ,donde sólo 5 están relacionados con el comercio, tiene una extensión de 6000 páginas y se elaboró en secreto durante 5 años sin una participación democrática. El Tratado impone mecanismos de solución de conflictos , y según sus críticos, atenta a la soberanía nacional de los países, que suscribieron este Tratado, que recién está conociendo la ciudadanía. Se obliga a recurrir ante un tribunal ante internacional , y no a las instancias del poder judicial , que existen en las naciones, que suscribieron el Tratado. Impide la producción de medicamentos genéricos.
Afecta también los derechos de internet y sociales de los países, que forman parte de este bloque. La Centra Única de Trabajadores de Chile sostiene, que daña los derechos laborales y ha pedido al Senado, que no ratifique este Tratado. Entre las naciones firmantes están: Canadá, Australia, Japón, México, Nueva Zelandia, Perú, Singapur y Vietnam. Se mantienen pendientes, sin ratificar, Chile, Brunéi Darussalam y Malasia.
Es importante considerar los impactos, que puede producir al país ratificar este Tratado. Puede afectar la soberanía de la Nación en materias ambientales como los derechos de aguas y recursos genéricos, además de limitar las materias asociadas a los pueblos indígenas y fortalecer a los grupos económicos multinacionales, que contribuyeron a establecer las reglas del comercio mundial. Este Tratado fue redactado por los abogados y lobbistas, que trabajan para las multinacionales y su finalidad es proteger a los inversionistas. El Tratado limita la capacidad de los estados firmantes.
A pesar que los Tratados no están sobre la Constitución, loa Estados están obligados a cumplir los compromisos internacionales que ratifica. El Senado chileno no debe ratificar este Tratado. Tiene que esperar que se redacte y aprueben la Nueva Constitución de Chile, que elaborá la Convención Constituyente. La Nueva Carta Magna garantizará los derechos de los chilenos, protegerá la biodiversidad y el ecosistema de nuestro país, afectado por el cambio climático y el calentamiento global de la tierra. El nuevo gobierno del Presidente Gabriel Boric Font, que asumió en Chile, el 11 de marzo del 2022, si lo considera nocivo para el país, tiene la facultad de retirarse de este Tratado .