Carlos Graña Sarmiento, periodista
La Comunidad de Estados Latinoamericanos y Caribeños (CELAC), constituye un mecanismo de concertación autóctono de América Latina , que se se proyecta para reemplazar a la Organización de Estados Americanos (OEA), que solo ha servido a lo largo de la historia a los intereses de los diferentes gobiernos de Estados Unidos. Es un mecanismo de concertación e integración regional con el fin de avanzar en la unidad en la integración política, económica, social y cultural, y aumentar el bienestar social, la calidad de vida, y el crecimiento económico de la región, y promover el desarrollo independiente y sostenible sobre la base de la democracia la equidad y la más amplia justicia social.
La integran 33 países: Antigua y Barbuda, Argentina, Bahamas, Barbados, Belice, Bolivia, Brasil, Colombia, Costa Rica, Cuba, Chile, Dominica, Ecuador, El Salvador, Granada, Guatemala, Guyana, Haití, Honduras, Jamaica, México, Nicaragua, Panamá, Paraguay, Perú, República Dominicana, San Cristóbal y Nieves, San Vicente y Las Gradinas, Santa Lucía, Surinam, Trinidad y Tobago, Uruguay y Venezuela. Comenzó a funcionar, el 3 de diciembre del 2011.
A diferencia de la OEA, la CELAC nació para promover la unidad y la paz en nuestra América a través del dialogo, independientemente de las diferencias políticas de los gobiernos de los 33 países que la integran. Ha promovido una política no injerencista en los países del hemisferio Sur y ha ha respectado los principios de autodeterminación de los pueblos, sin inmiscuirse en sus asuntos internos. Abarca una población de 596.937 millones de habitantes(8.53 % de la población mundial) , que residen en una superficie de 21.404.837,47 km². Estados Unidos no forma parte de esa comunidad de naciones independientes.
La Organización de Estados Americanos, que hoy encabeza Luis Almagro, ha sido y es la punta de lanza contra los gobiernos progresistas de América del Sur, ha fomentado, según el Gobierno de Bolivia, que Preside Luis Arce , golpes de Estado, como el perpetrado más recientemente en Bolivia, que motivó la renuncia del Presidente Evo Morales.
La OEA se ha prestado para fraudes electorales, agresiones continuas contra gobiernos como el de Venezuela, Nicaragua y Cuba, mientras calla ante los crímenes y la represión que actualmente pululan contra diferentes pueblos de la América . Se ha convertido en una entidad hostil
La CELAC, en cambio, se creó sobre la base del respeto mutuo, el diálogo y la cooperación, y más que todo ello para evitar que Sudamérica, termine siendo un escenario de guerra. Es necesario crear un nuevo orden geopolítico para el continente americano. Así lo ha entendido el Presidente Pro Tempore de Celac, Andrés Manuel López Obrador y mandatario de México. «Debe ser semejante a la Unión Europea, pero apegado a la historia de América, a la realidad de este continente, que contribuya a resolver los conflictos entre ellos y potencie la unidad de sus naciones. Se necesita de un organismo totalmente autónomo, y no lacayo de nadie, sino mediador a petición y aceptación de las partes en conflicto en asuntos de derechos humanos y de democracia» enfatizó el Presidente de México.
Las declaraciones la hizo al conmemorarse 238 aniversario del natalicio de Simón bolívar, que se recordó en el Castillo de Chapultepec, en ciudad de México, el 24 de julio del 2021, en el marco de la realización de la cumbre. de la Comunidad de Estados Latinoamericanos y del Caribe. «Nuestras similitudes como latinoamericanos son muchas más que nuestras diferencias, podemos y debemos enfrentar los desafíos del futuro como una sola potencia, es nuestra mejor opción», sostuvo Andrés Manuel López Obrador , cuando asumió el 8 de enero del 2021, la Presidencia Pro Tempore de la CELAC, de ese mecanismo indispensable y legítimo, que puede revitalizarse con el apoyo de varios gobiernos, entre ellos el actual de Argentina, que abogan por la convivencia pacífica y la integración definitiva de la región. América Latina debe ser una Zona de Paz y no de conflictos, y debe potenciarse su unidad.
La CELAC, tiene hoy como Presidente Pro Tempore a Alberto Ángel Fernández de Argentina. Está organización debe reemplazar con urgencia a la OEA, responsable una vez más de las divergencias, conflictos y el complejo panorama que se vive hoy desde el Rio Bravo hasta la Patagonia,