Premio Nacional de Arquitectura, Miguel Lawner, llamó a recuperar la tradición de construir  casas dignas. “Es una desgracia, que a partir del régimen militar se haya perdido esa rica tradición”

Una intensa jornada vivió en Iquique, a sus 91 años y 70 de trayectoria, Miguel Lawner, Premio Nacional de Arquitectura 2019-2020, quien vino a la ciudad para participar en diversas actividades de la XXI Bienal de Arquitectura y Urbanismo. Una de ellas, el conversatorio realizado al aire libre, en la plazuela del Cementerio N° 1, para hablar de lo común y de lo corriente, conquistando a las nuevas generaciones de profesionales y estudiantes del área.

Lawner, en este ambiente distendido, instalado en la barriada que une elementos como la feria, el cementerio y donde convergen varios barrios tradicionales, desarrollo sus palabras, respecto del ejercicio de la arquitectura y la función social que tiene.

Además, el moderador de la mesa de conversación, el arquitecto Rodolfo Rojas, interactuó con sus colegas Ademir Meléndez y Ariel Riquelme, para dar contexto a la actividad.

Luego invitó a la mesa al genealogista José Aflorino Torres; al sociólogo y encargado de la Oficina de Migraciones de la Municipalidad, Mauro Zarricueta; a la arquitecta, Carla Aguilera, encargada del Museo de La Tirana.

Concluido el conversatorio, Lawner participó de un recorrido por el Cementerio N° 1, guiado por el arquitecto Rodolfo Rojas y el genealogista José Aflorino Torres.

Ambos vienen estudiando el recinto hace varios años, descubriendo a través de las personas que yacen en ese camposanto, parte importante de la cultura de la ciudad, incluso desde tiempos en que era de Perú; las tradiciones; el emplazamiento en el territorio y las relaciones familiares, entre otros aspectos.

El decano arquitecto, se mostró muy interesado en el recorrido, requiriendo más antecedentes sobre determinados pabellones, mausoleos, tumbas, etc. Se sorprendió al descubrir que el escultor italiano, Luigi Orengo, insigne constructor de mausoleos en Italia, construyera un mausoleo en su país y enviado a Chile, en 1904, por encargo de la familia Pascal. La obra es de gran valor arquitectónico; cuenta con aplicaciones de mármol en gran cantidad y de variados colores.  Para los expertos, y pese a su deteriorado estado, se considera una obra de arte, la única en Chile y Sudamérica, porque el prolífero trabajo de Luigi Orengo, se desarrolló en Europa.

ESPACIO LÓGICO Y NATURAL

Al concluir sus actividades, Miguel Lawner dijo sentirse muy gratificad, especialmente porque “aquí hemos escuchado la voz del ciudadano común, en su espacio lógico, natural y hemos conocido los conflictos y también los éxitos que significa vivir en una ciudad que está en transformación -para bien y para mal-, y que tiene que aprender cómo recibir este flujo migratorio, que no es nuevo, porque el país ha conocido inmigraciones desde sus verdaderos orígenes y ha sabido asimilarlo”.

En el caso de Tarapacá, mencionó la migración de chinos, “que estaban instalados y explotados acá. (…) Es una lección permanente, el país nuestro se ha formado en base a la integración social y étnica, y eso es un valor muy grande. Creo que eso es uno de los méritos mayores que tiene el país que tenemos que saber cuidarlo”.

Profundizó sobre la situación migratoria, señalando que “las tendencias que surgen de pronto… y acusar a las olas migratoria algunos de los conflictos que se originan en el país, (creer) son un riesgo, que hay que eliminarlas, que hay que combatirlas”, pero, resalta que “el inmigrante ha sido fundamental para formar este país y seguirá siéndolo”.

El arquitecto se caracteriza por su propuesta de ganar el suelo, los espacios para la construcción de viviendas sociales digna, sin embargo, tras la dictadura, la política habitacional recrudeció en forma negativa.

“Nosotros estamos edificando para un ser vivito y coleando. No debemos tener discriminaciones. Yo en mi vida profesional me he esforzado por entregar el techo más digno posible a todos los ciudadanos de este país, cualquiera sea su condición”.

Y remata: “Es una desgracia que a partir del régimen militar se haya perdido esa rica tradición que tuvimos antes. Tenemos que hacer lo posible por recuperarlo”.

LA BIENAL

La Bienal de Arquitectura y Urbanismo, es el evento más importante para los arquitectos en nuestro país. En esta versión XXI, se realiza en forma simultánea en Santiago, Iquique, La Serena y Puerto Montt, implicando un gran despliegue.

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