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Cambio 21/ Por Verónica Romero.- El tener una Presidenta a cargo del país es sólo una forma de disimular cómo somos los chilenos, ya... El machismo en Chile sigue «vivito y coleando»

machismoCambio 21/ Por Verónica Romero.- El tener una Presidenta a cargo del país es sólo una forma de disimular cómo somos los chilenos, ya que en realidad, el 87 por ciento de lasmujeres ha manifestado que el nuestro es un país machista, lo que se ve reflejado en distintos ámbitos de la sociedad, principalmente en el trabajo, la libertad sexual y, como no, la política.

Durante el encuentro anual de la Clinton Global Initiative, que lucha contra la desigualdad desde la educación, dirigido por el expresidente norteamericano Bill Clinton, la Presidenta Michelle Bachelet se refirió a la inclusión femenina en cuanto a las posiciones de poder o importancia social que las mujeres han logrado en Chile.

En medio de la conversación, la Mandataria destacó que en Chile haya mujeres en cargos importantes como el de ella y el de Isabel Allende Bussi, presidenta del Senado. Pero también hay otras que destacan en este ámbito, como Bárbara Figueroa, presidenta de la Central Unitaria de Trabajadores (CUT); Nashla Aburman y Melissa Sepúlveda, presidentas de la federaciones estudiantiles más importantes del país (FEUC y FEUCH respectivamente); Francisca Correa, presidenta de Evolución Política (Evópoli) y Patricia Morales, presidenta del Partido Progresista (PRO), entre otras.

La Presidenta Bachelet expresó que estamos «lejos de donde deberíamos estar, hay todavía mucho `macho men´ en Latinoamérica», algo que es bastante cierto, pues si bien en Chile las mujeres han logrado posicionarse en distintas áreas, el país continúa siendo machista.

Con respecto a este tema se refirió Carolina Carrera, presidenta de la Corporación Humanas, quien comentó a Cambio21 que «efectivamente, a pesar de que hemos tenido secciones que son muy importantes e interesantes de mujeres que están en primera línea en cargos como las vocerías de los movimientos estudiantiles, medio ambientalistas e indígenas incluso, en la encuesta Humanas del 2013, un 87 por ciento de las mujeres consideran que Chile es un país machista y un 79 por ciento plantea que se ha sentido discriminada por ser mujer en este país».

También se refirió al tema el sociólogo Pablo Huneeus, quien expresó a Cambio21 que «en Chile existe el machismo y se ve reflejado principalmente en las instituciones, como la Iglesia y las Fuerzas Armadas, también en el deporte, porque se privilegia a los deportes masculinos por sobre el femenino. Si bien hay cargos importantes como la Presidenta, existe el de la cocinera que es muy importante también, lo que pasa es que se trata de cargos simbólicos, para mostrar que se vea de afuera, pero que sirven más bien para ocultar el trasfondo más importante».

Lo anterior se refleja en varios puntos, el principal tiene que ver con el ambiente laboral, ya que en muchos lugares las mujeres perciben un sueldo 20 por ciento menor que el de un hombre, su participación política es bastante menos que la del otro género y, si esto no fuera poco, también hay un gran porcentaje de mujeres que tienen un pensamiento machista sobre las tareas que le corresponde a cada quien.

Sobre esto, Carrera explicó que «esto tiene que ver con temas más estructurales como el trabajo, donde el 96 por ciento de las mujeres se siente más discriminada, a pesar de que en los últimos años ha aumentado la integración de ellas en esto, ya que hay áreas que son exclusivas de los hombres y están en puestos inferiores que estos. El otro ámbito es la libertad sexual, pues el 85 por ciento de las mujeres manifestó que son discriminadas, lo que tiene que ver con el hecho de decidir sobre sus propios cuerpos como la maternidad voluntaria y el acceso a métodos anticonceptivos.

El tercer ámbito es en la política, ya que si bien tenemos una Presidenta mujer y una presidenta del Senado que es mujer, el nivel de participación sigue siendo bajo, ya que no se alcanza ni el 20 por ciento de mujeres, que es un mínimo, es por eso que las esperanzas están puestas en el cambio al sistema binominal, que incorpora una representación equilibrada entre hombres y mujeres».

Para Pablo Huneeus, la vigencia del machismo se ve en el ámbito de las leyes civiles, pues «el hombre puede hacer lo que quiera con lo que es de él, sin embargo, la mujer debe pedir permiso al marido, por ejemplo, para cobrar una herencia. También se presenta en el mayorazgo, pues en los grandes clanes familiares, siempre es el hombre mayor quien toma las riendas del buque» comentó.

Respecto de lograr un equilibrio en la sociedad, el sociólogo doctorado en la Universidad de París, explicó que «mientras no se vea una igualdad en el tema religioso y en lo deportivo, que son cosas más visuales, lo demás viene por añadidura. Yo creo que hay que empezar por la Iglesia Católica, donde se debe reclamar el derecho de las mujeres de ser parte del clero».

Para lograr una sociedad más equitativa, Carolina Carrera cree que «hay dos partes que deben actuar juntas, que son un cambio cultural y políticas de Estado que tomen en cuenta la corresponsabilidad. Seguimos poniendo una sobrecarga en las mujeres mientras ganemos un tercio menos que los hombres por igual trabajo, con esto se vuelve a lo mismo y es por ello que deben existir políticas públicas que se encaminen a igualar las condiciones».

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