Yasna Provoste: Es singular escuchar a los que la destituyeron cinco años después diciendo «que fue injusto»
Actualidad 17 abril, 2013 Edición Cero
Cambio 21/ La ex ministra de Educación que fue destituida por la derecha en el año 2008 dijo que «tampoco tomaré la actitud de guardar silencio, como ellos lo hicieron hace cinco años y que hoy reconocen que esto es injusto». Y ñadió que «nos hubiera gustado escuchar estas voces entonces».
La ex ministra de Educación Yasna Provoste, quien fue destituida en 2008 tras una acusación constitucional en su contra, dijo que se «sorprendió mucho» cuando escuchó al actualmente suspendido titular de esa cartera, Harald Beyer, en la audiencia realizada en el Senado.
Beyer reconoció, durante la jornada en la Cámara Alta, que Provoste «no merecía la destitución, y creo que yo tampoco».
Al respecto, Provoste consideró que la mención hecha por el suspendido ministro de Educación «fue compartir el dolor vivido durante todo este tiempo».
«Uno dice: la justicia tarda pero llega. Y a veces cuando llega tan tarde ni siquiera se puede aminorar la situación de injusticia», señaló.
En cuanto a la votación que se efectuará este miércoles para decidir sobre el libelo en contra de Beyer, Provoste insistió en que el Senado debe juzgar según el mérito de la acusación.
«Tengo plena confianza en que el Senado revise y juzgue en su mérito esta acusación constitucional. Mi opinión personal es que no le deseo a nadie las consecuencias de esta injusticia», aseveró.
«Tampoco tomaré la actitud de guardar silencio, como ellos lo hicieron hace cinco años y que hoy reconocen que esto es injusto.
Nos hubiera gustado escuchar estas voces entonces», declaró.
No obstante, Provoste declinó referirse a los detalles del proceso que enfrenta el suspendido ministro Beyer.
«El mérito de la acusación no lo he visto y creo que no me corresponde» pronunciarme sobre el tema, aseveró.
«Por un tema de salud mental decidí bajar la cortina», añadió, e insistió en que busca volver al Parlamento -como candidata DC como diputada por Atacama- «sin afán de revanchismo».
Pese a ello, reconoció que las acusaciones constitucionales «son un juicio político».
También insistió en que a su juicio no se puede comparar su situación con respecto a la acusación contra Beyer.
«Son cosas distintas. En el caso del ministro de Educación actual, se está juzgando por una situación del ministerio, de una inacción. En el caso nuestro era por un asunto radicado en una seremi», aseveró.
«Cinco años de una inhabilidad en la que no puedes trabajar en el sector público es una injusticia», agregó.