Amenaza de Bolivia de demandar a Chile en una corte internacional es analizada como una medida más “efectista que efectiva”

Cambio 21 / El gobierno de Evo Morales divulgó su intención de solicitar un juicio en un ente mundial. Sin embargo, para el cientista político Guillermo Holzmann estos dichos “no se condicen con la actual estructura diplomática que perdura entre ambas administraciones”.

La eventual acción judicial la enunció el vicepresidente de Bolivia, Álvaro García Linera. Que la administración altiplánica esta juntando los antecedentes necesarios para iniciar una demanda internacional contra Chile por la detención de tres soldados que ingresaron en forma ilegal y con municiones de guerra a territorio chileno. Para García Linera, tal arresto violó «la igualdad jurídica entre los estados».

«Hemos hecho las denuncias verbales correspondientes y el equipo jurídico de la Cancillería como de Defensa está acumulando y cumpliendo los requisitos previos para hacer una demanda en un ámbito de carácter internacional», expuso García.

Sin fundamentos

Pero tales discursos son observados con tranquilidad en nuestro país. Los mecanismos de entendimiento entre ambas naciones, según explicó el parlamentario RN José Manuel Edwards, bastarán para solucionar este problema entre países vecinos.

Para el legislador, la determinación boliviana de llevar el caso de los tres conscriptos retenidos a un tribunal especializado es «una acción sin ningún sentido». El integrante de la comisión de Relaciones Exteriores afirmó a Cambio21 que este contexto se enmarca bajo «el incentivo del gobierno de Evo Morales por recuperar la popularidad de su gestión como mandatario».

Según el diputado de derecha, la propuesta de demandar al Estado chileno se sostiene en «una estrategia política para lograr un mayor porcentaje de adhesión a nivel interno por parte de Morales».

«Nuestro país debe velar y realizar todos los esfuerzos para que estas tres personas regresen lo antes posible a Bolivia», sentenció a este medio, y añadió que se debe aprovechar la oportunidad de utilizar los mecanismos diplomáticos actuales para arreglar esta situación ya que son «procedimientos transparentes».

Método «efectista»

El cientista político Guillermo Holzmann tiene una idea clara en cuanto al nuevo duelo diplomático entre Bolivia y Chile. «Este suceso es eminentemente efectista», dijo a Cambio21 y adicionó con que este hecho «no se condice con la actual estructura diplomática que perdura entre ambos gobiernos».

Para el experto, este tipo de asuntos y aseveraciones de nivel judicial, «no se hacen a través de los medios de comunicación», y prosiguió con que la ofensiva boliviana carece «de textos y de contenidos, por ende, su efecto como tal será nulo».

«Esta maniobra del gobierno de Evo Morales no se ajusta a ninguna lógica de entendimiento y de diálogo entre naciones», aseguró el analista. Según Holzmann, el anuncio de Álvaro García Linera se ubica en la constante necesidad de la administración altiplánica de «conseguir triunfos», en especial sobre la rivalidad histórica que existe contra Chile.

La línea que ocupa el mandato de Evo Morales se nutre del denominado «derecho de los pueblos, por sobre el rol que pueda cumplir el vigente Derecho Internacional».

Además Guillermo Holzmann concluyó con que estas instancias benefician a uno de los ámbitos más fuertes que existen en la gestión de Sebastián Piñera, como lo son las relaciones exteriores. «Esto da pie para que el actual gobierno se defienda y responda con argumentos», comentó a este medio.