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LaNacion/ La causa probable de la tragedia aérea de Juan Fernández fue la pérdida de control del avión CASA 212 por factores meteorológicos y... Juan Fernández: la supuesta responsabilidad de los 5 altos mandos FACH

LaNacion/ La causa probable de la tragedia aérea de Juan Fernández fue la pérdida de control del avión CASA 212 por factores meteorológicos y la baja altura del vuelo. El factor contribuyente fue humano, específicamente de los pilotos, por exponer la nave a un área inestable de fuertes vientos.

Estas fueron las conclusiones de la empresa constructora Airbus y la Junta Investigadora de Accidentes Aéreos (JIA) de la Dirección General de Aeronáutica Civil (DGAC). Pero ambas entidades también apuntaron a la falta de protocolos de la FACH para los aterrizajes en Juan Fernández.

La responsabilidad penal de los pilotos, los tenientes Carolina Fernández y Juan Pablo Mallea, se extinguió con su muerte. Sin embargo, para los abogados que representan a las familias de 9 víctimas, 5 ex altos mandos de la FACH deben responder judicialmente por la falta de este protocolo.

Según los abogados José Morgado, Cristián Arias y Maximiliano Delgado, estos 5 altos oficiales (tres en retiro y dos activos) eran los responsables de haber elaborado un protocolo de vuelo, acercamiento y aterrizaje al aeródromo del archipiélago, labor que no cumplieron.

Se trata de los generales en retiro Luis Ili Salgado y Julio Frías Pistono; los coroneles Guillermo Castro Guzmán y Aldo Carbone Frugone, ambos activos, y el comandante (R) César Pineda Troncoso. Los 5 fueron sancionados en un sumario interno de la FACH que concluyó el 28 de abril pasado.

 SUPUESTAS RESPONSABILIDADES 

En un escrito presentado este viernes, los tres abogados solicitaron procesar a los 5 altos oficiales por cuasidelito de homicidio con resultado múltiple y abandono de deberes militares. A continuación, las responsabilidades personales que habría tenido cada uno, según los querellantes.

El general (R) Ili era el comandante del Comando de Combate de la FACH y entre sus funciones estaban aprobar, disponer y supervisar la aplicación de las tácticas, técnicas y procedimientos para ejecutar las operaciones aéreas. Ili renunció a la FACH antes de concluir el sumario interno.

Al coronel Castro, en su calidad de jefe del estado Mayor del Comando de Combate, le correspondía elaborar y actualizar las normas operativas que permiten el eficiente desarrollo de las actividades de vuelo. El sumario que desarrolló el fiscal Leopoldo Moya lo sancionó con un día de arresto.

El general (R) Frías era el comandante en jefe de la V Brigada Aérea (Cerro Moreno, Antofagasta), base del CASA 212, y parte de sus funciones consistía en formular las normas y procedimientos de seguridad aeroespacial. Fue llamado a retiro por no ejercer el “control superior”.

El coronel Carbone, jefe de Estado Mayor de la V Brigada Aérea al momento del accidente, tenía como funciones elaborar, actualizar, modificar y publicar los planes, normas y procedimientos internos de la brigada. El sumario interno lo sancionó con la medida disciplinaria de “reprensión”.

El comandante (R) Pineda era el comandante del Grupo de Aviación N° 8, al que pertenecía el CASA 212, y debía disponer las medidas de seguridad militar y aeroespacial para preservar los recursos materiales y humanos bajo su mando. Tras el sumario interno, también fue llamado a retiro.

SUPUESTOS DELITOS NO CONLLEVAN PENAS DE CÁRCEL

Según los abogados, estos supuestos incumplimientos de deberes militares derivaron por negligencia o imprudencia en la muerte de 21 personas, lo que configuró un presunto cuasidelito de homicidio con resultado múltiple. Según los legistas, de haber existido un protocolo, el accidente del 2 de septiembre de 2011 no habría ocurrido.

Los abogados esperan que el ministro en visita Juan Cristóbal Mera decrete los procesamientos para que se haga “plena justicia”, ya que las penas asociadas a estos ilícitos no conllevan pena de cárcel. En caso de que el magistrado rechace la solicitud, los querellantes recurrirán a la Corte Marcial.

Alfredo Morgado representa a los familiares de Rodrigo Cabezón de Amesti, Joel Lizama Nahuelhual, Romina Irarrázabal y Flavio Oliva Pino; Maximiliano Delgado, a las familias de la teniente Fernández, el sargento Eduardo Jones San Martín y los cabos Erwin Núñez Rebolledo y Eduardo Estrada; y Cristián Arias, a la familia de Galia Díaz Riffo. 

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