99 años de masacre de La Coruña
Opinión y Comentarios 5 junio, 2024 Edición Cero
Carlos Graña Sarmiento, Periodista.-
En el 2025 se conmemorarán 100 años desde que ocurrió la masacre obrera de La Coruña, que dejó un saldo de 2.000 personas asesinadas . El lamentable acontecimiento está siendo rescatado por los historiadores de Tarapacá, que han organizado una serie de actividades conmemorativas para que se conozca este episodio histórico, que es considerado la segunda masacre de obreros después de la Escuela Domingo Santa María de Iquique. En la Coruña murieron también hombres, mujeres y niños. La Coruña se encontraba enclavada en la asoleada pampa del Tamarugal, en aquel tiempo su población superaba las 2.000 personas que vivían en precarios campamentos.
La masacre de la Coruña, que ocurrió el 05 de junio de 1925, se realizó después que el gobierno de Arturo Alessandri Palma declaró a las provincias de Tarapacá y Antofagasta en estado de sitio y designó como jefe de plaza al general Florentino de la Guarda, se enviaron refuerzos militares a los puertos de Iquique, Pisagua y Mejillones, en los buques de guerra Zenteno, O´Higgins, Lynch. Riquelme y Williams Rebolledo.
El intendente de Tarapacá, Recaredo Amengual, por su parte, dispuso la subida inmediata de tropas de infantería del Carampangue y de caballería del Granaderos, sumando a algunos marinos para combatir sublevaciones de obreros. El coronel Acacio Rodríguez solicitó el refuerzo del grupo de artillería General Salvo, que con cañones y municiones de mayor alcance bombardearon las instalaciones de la oficina salitrera, tras los fuegos de artillería algunos obreros huyeron por la pampa, se produjo un gran incendio que consumió viviendas, bodegas, almacenes, talleres, produciéndose el escape de hombres, mujeres y niños mientras los soldados disparaban , arremetiendo finalmente la infantería y caballería.
Una vez situada la oficina La Coruña, se encarceló y torturó a los obreros que no habían huido, las persecuciones se hicieron por diferentes oficinas salitreras que se habían adherido al paro, 600 obreros fueron apresados en la pampa y enviados al velódromo de Iquique.
La movilización obrera comenzaron, en marzo de 1925, cuando los trabajadores ferroviarios organizados por la Federación Obrera de Chile comienzan infructuosas negociaciones por mejores condiciones laborales y salariales, iniciándose diversos mecanismos de lucha de los obreros, llegando finalmente a la huelga.
En abril de ese año, los obreros del salitre adhieren a la paralización, entre los días 7 y 12, presentando sus propias demandas. La huelga termina con negociaciones por separado de los gremios, logrando mejorar muy poco las condiciones de los trabajadores.
En un agitado clima social, los obreros retornan a sus faenas mineras con descontento de los resultados de la negociación, sucediendo diferentes hechos que van exaltando las relaciones entre la organización obrera, las autoridades y los patrones mineros. El 28 de mayo, la oficina San Pablo se declara en huelga; el 31 de mayo, son deportados al sur del país desde Pisagua –a bordo del vapor Mapocho– 33 dirigentes de la Federación Obrera de Chile; el 2 de junio, se clausura y allana por autoridades policiales el periódico “El despertar de los trabajadores” de Iquique.
El 3 de junio, la Federación Obrera de Chile, (FOCH) resuelve la realización de una huelga general por 24 horas, convocando distintas concentraciones en el Cantón de San Antonio, produciéndose enfrentamientos en el pueblo de San Antonio entre los obreros y las fuerzas policiales, resultando muertos dos policías. Un día después, el 4 de junio, los obreros se tomas las oficinas Galicia y La Coruña, iniciándose una huelga general que significó la toma de numerosas oficinas salitreras.
La industria salitrera era de propiedad mayoritaria de los británico. De manera que las huelgas impulsadas por los trabajadores del Tarapacá y Antofagasta eran consideradas como una amenaza para los intereses británicos. Sir Thomas Hohler, que asumió la Legación Británica en Santiago de Chile, tendrá un rol destacado en los acontecimientos ocurridos en Chile durante 1925 y 1926. El representante del Reino Unido comprendió que la inestabilidad política en Chile eran una amenaza para los intereses británicos.
Ello fue la base de toda su gestión diplomática y de la presión que ejerció sobre el gobierno chileno, que lideraba Arturo Alessandri Palma. Los británicos intervinieron activamente en los asuntos internos de Chile. Así lo evidencia la correspondencia de los cónsules de Iquique y Antofagasta, que manifestaban su preocupación por las huelgas salitreras al gobierno del Primer Ministro del Reino Unido Stanley Baldwin, que apoyó al gobierno de Arturo Alessandri Palma.
Los británicos estaban inquietos ,porque se había fortalecido el movimiento obrero. La Federación Obrera de Chile, fundada el 25 de diciembre de 1919, adquiría cada vez mayor fuerza. Las luchas reivindicativas de los obreros de la pampa estaban estrechamente vinculadas con la existencia de la industria salitrera como actividad privada. Las acciones del proletariado chileno atacaban directamente las bases de la industria del nitrato en manos británicas . Desde 1920 exigía su nacionalización.
Nada justifica la violenta represión que se desató contra los obreros del salitre, ese 05 de junio de 1925 en La Coruña. El gobierno de Arturo Alessandri Palma no medio durante la realización de la huelga; sino respondió por la vía armada a una serie de sublevaciones que se produjeron en el marco de una huelga general de trabajadores de la provincia de Tarapacá, que se realizaron para lograr mejores condiciones laborales y económicas para los trabajadores de la industria salitrera.