Piñera cierra la puerta a la educación superior gratuita y anuncia kinder obligatorio
Actualidad 21 mayo, 2013 Edición Cero
Cambio21/La educación es una de las áreas que generaba mayor expectativa en la última cuenta pública del Presidente Sebastián Piñera, con miras a cómo se enfocará la política del Ejecutivo en sus últimos diez meses de gestión.
Sin embargo, muy lejos de lo que esperaba el movimiento estudiantil, no hubo mayores novedades en educación superior, y más bien el discurso estuvo centrado repasar las medidas ya adoptadas por el Gobierno y en resaltar la relevancia de la educación preescolar, pues, según remarcó el Mandatario, «es ahí donde se hace la verdadera diferencia y se construye una sociedad más justa».
En esa línea, el anuncio más relevante fue el envío de una reforma constitucional para instaurar el kínder obligatorio, con el fin de que éste sea universal y gratuito.
«Así como en 1920 el ex Presidente Sanfuentes estableció la instrucción primaria obligatoria de cuatro años; en 1965 el ex Presidente Frei Montalva hizo lo mismo con la educación básica de ocho años; y el año 2003 el ex Presidente Lagos instauró la educación media obligatoria; hoy quiero anunciar que, para avanzar hacia la universalidad y gratuidad de la educación preescolar, próximamente enviaré a este Congreso una reforma constitucional que establece el kínder obligatorio para todos los niños de Chile», manifestó el Mandatario. El anuncio fue seguido de un cerrado aplauso.
Piñera sostuvo que «de esta forma empezaremos a nivelar la cancha e igualar las oportunidades desde la más temprana infancia, cuando todavía podemos hacer una diferencia. Y de esta forma tendremos un país que asegura y garantiza educación gratuita y de calidad por trece años a todos nuestros niños y jóvenes (de kínder a cuarto medio)».
Para estos efectos, anunció que paralelamente enviará al Congreso un proyecto de ley que crea gradualmente la subvención universal para los niños desde los tres años de edad, junto a una subvención preferencial para los niños más vulnerables.
En cuanto a la educación superior, el Mandatario reafirmó la política del Gobierno de entregar financiamiento en la entrega de becas y créditos a los estudiantes y omitió el tema del lucro en las universidades.
«Aseguramos a todos los jóvenes con mérito, pertenecientes al 60% de los hogares más vulnerables, el derecho una beca garantizado por el Estado. Y a todos los demás, con la sola excepción del 10% más favorecido, el derecho a obtener préstamos en condiciones subsidiadas y favorables», afirmó el Mandatario, quien remarcó que de esta forma «cumpliremos con nuestro compromiso que ningún joven con mérito se quede fuera de la educación superior por falta de recursos y que ninguna familia chilena vea transformado el sueño de un hijo profesional en una verdadera pesadilla con la mochila de deudas».
De esa forma cerró la puerta a avanzar hacia la gratuidad de la educación superior, como demandan los estudiantes. «Lo queremos decir con toda claridad, no nos parece justo que con los recursos de todos los chilenos, que siempre son escasos frente a las múltiples necesidades de nuestra sociedad, estemos financiando la educación superior de los jóvenes más privilegiados de nuestro país», afirmó.
El único anuncio que realizó para el nivel terciario de enseñanza fue el envío de un proyecto de ley que crea una subsecretaría específica de Educación Superior, la que, según indicó, concibió tras «recoger opiniones y aportes de la comunidad educacional».
Asimismo, instó al Parlamento a «alcanzar pronto los consensos necesarios» para aprobar los tres principales proyectos de ley que ya envió el Ejecutivo: el que crea un sistema único de financiamiento para la educación superior, la Superintendencia de Educación Superior y el nuevo Sistema Nacional de Acreditación de las instituciones de educación superior.