Edición Cero

La ingeniera química, María Rosa Jelcic, ha debido convivir con un tremendo dolor. El de saber que su hijo, siendo un menor de edad,... La traición de un jerarca de la iglesia católica, a una familia que le entregó su confianza absoluta

La ingeniera química, María Rosa Jelcic, ha debido convivir con un tremendo dolor. El de saber que su hijo, siendo un menor de edad, cuando recién se empinaba por la pre-adolescencia, fue abusado sexualmente; y ni más ni menos  por quien fuera el obispo de Iquique, Marco Órdenes Fernández, hoy expulsado de la iglesia por el propio Papa Francisco, como consecuencia del abuso de menores. La familia Pino Jelcic, había depositado toda su confianza, en el joven obispo.

María Rosa, junto a su esposo  Manuel Pino, quien fuera Director del desaparecido canal de TV, Telenorte, constituían una familia muy católica, de esas que van a misa como parte de su rutina familiar. Y, precisamente, en esos valores cristianos educaron a sus hijos.  Por eso, cuando Rodrigo, el menor, les dijo que quería ser acólito, orgullosos lo fueron a dejar a un encuentro que se realizó en la Catedral. Ahí conocieron a Marco Ordenes, el obispo de 45 años.

Se hicieron cercanos, amigos y hasta lo recibían en su casa en almuerzos dominicales. Toda esta dinámica ocurría mientras en la vida paralela que llevaba el ex prelado, abusaba de su hijo. “Nos traicinó”, señala hoy María Rosa, pero en su relato no se advierte nada de rencor; sólo el profundo amor por su hijo y el dolor por lo sucedido, pero sobre todo, la fe que les acompañó en su fuero interno, para salir adelante.

NOTA RELACIONADA

“Por actos manifiestos de abusos de menores”, ex obispo de Iquique Marco Órdenes, fue expulsado de la Iglesia Católica, por decisión del papa Francisco

3 respuestas a “La traición de un jerarca de la iglesia católica, a una familia que le entregó su confianza absoluta”

  1. Luis Castro Delgado dice:

    Desde OSORNO toda nuestra fuerza para ustedes cómo familia.Un abrazo a su hijo.
    Bendiciónes a todos ustedes.
    Laicos y laicas de OSORNO

  2. Homero Varela Aguirre dice:

    Mi admiración, respeto y apoyo a mis queridos amigos Manuel Pino y María Rosa Jelcic, que han recibido – por fin – el apoyo del Vaticano, en la decisión del Papa Francisco, en su larga lucha por lograr la justicia, que no se logró en nuestro país por la prescripción del delito, pero que la Justicia canónica ha logrado la sanción de expulsión aplicada por el Papa al obispo Marco Ordenes luego que el Jefe de la Iglesia Católica verificara que las informaciones que recibía desde la jerarquía en Chile no se ajustaba a la verdad.

  3. Mari dice:

    No se ha hecho justicia. Todos los violadores y abusadores de niños deben estar en la cárcel. No es posible que a ellos los manden a «meditar» a algún convento. La justicia debería ser implacable con ellos, sobretodo porque durante años se encubrieron entre ellos. Esto es la punta de iceberg, ojalá no sea una cortina de humo.