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Víctor Guerrero Cossio/ Sociólogo UNAP. El puerto de Iquique, pese a contar con un gran potencial de carga brasileña destinada al consumo asiático, principalmente de la... 5 Hipótesis para entender el abandono del Puerto de Iquique

victor guerrero okVíctor Guerrero Cossio/ Sociólogo UNAP.

El puerto de Iquique, pese a contar con un gran potencial de carga brasileña destinada al consumo asiático, principalmente de la república China, en los últimos meses ha visto entorpecida esta oportunidad por lentas e inadecuadas decisiones del directorio de la Empresa Portuaria Iquique.

Las incansables giras de Jorge Soria Quiroga, Alcalde de Iquique, realizadas desde 1964, reimpulsadas en la década del 90 y destinadas a fortalecer la integración física de la región de Tarapacá con el Estado de Mato Grosso y consiguientemente con Bolivia y Paraguay, han rendido buenos frutos y convencido a Gobernadores, parlamentarios y alcaldes de dichos países que el corredor bioceánico más fructífero es el que tiene a Iquique y su puerto como enlace principal para acceder a los países de Asia Pacífico.

Sin embargo, las instalaciones portuarias de Iquique, obsoletas y en gran parte destruidas por el terremoto de Abril del 2014, no se reconstruyen con la modalidad y urgencia que se necesita. Por ello cabe preguntarse por qué las autoridades nacionales, regionales y las empresas privadas no disponen mayor empeño en fortalecer el Puerto local.

A continuación propongo 5 hipótesis para entender esta situación:

1.- La falta de una moderna política portuaria estatal, que actualice la institucionalidad del sector. Esto resta capacidad y deja la preeminencia portuaria en el océano Pacífico a Perú. Para el norte de Chile, sólo reconoce su producción minera, dejando la responsabilidad de dichas exportaciones a las propias empresas mineras que construyen sus propios puertos.

2.- Intereses económicos transnacionales de capitales marítimos y portuarios, que asociados a empresas nacionales del sector disputan los principales puertos del Pacífico y que muchas veces trascienden las fronteras nacionales. Así, las grandes transnacionales marítimas operan en distintos países y les interesan más sus negocios particulares que el bien común nacional.

3.- Intereses económicos nacionales de capitales marítimos y portuarios, como se observa en el caso de Iquique Terminal Internacional, cuyo accionista principal -70 %- es la familia Luksic y que en distintos momentos, documentos y acciones ha mostrado su finalidad de concentrar la carga regional, incurriendo en prácticas y conductas monopólicas, como ha sido en Iquique el período post terremoto a raíz de la dilación en la reparación de los sitios –estatales- 1 y 2.

4.- Intereses de oligarquías políticas nacionales, que asociadas a empresas chilenas han aprovechado su presencia en Gobiernos y empresas estatales para dar ventajas a corporaciones privadas, como es el Decreto dictado por el Gobierno de Chile en el año 1998 para promover inversiones en el Puerto de Mejillones y constituirlo en el mega puerto del norte de Chile.

5.- Intereses sectoriales de los capitales agrarios chilenos, reunidos en la Sociedad Nacional de Agricultura, que en el pasado rechazaron el comercio con Bolivia por competir con su producción en el mercado regional. Actualmente la misma SNA rechaza nuestro puerto para bloquear la competencia de los alimentos brasileños en el mercado internacional, en especial China.

Son estas razones, presentadas aquí de manera hipotética, las que explican la posición de las autoridades chilenas y las empresas privadas del sector de no aprovechar esta oportunidad de promover el desarrollo en el extremo norte del país y particularmente de Iquique. No se trata de que el mercado actual nos desfavorezca ni que la visión del desarrollo que promueve la Municipalidad de Iquique no tenga sentido, sino la conjunción de intereses públicos y privados que establecen hegemonía en el marco de una visión del estado centralista que domina en nuestro país.

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