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Guillermo Jorquera Morales/ Ex Director Teatral del TIUN-TENOR Sintonía de Amplitud Modulada es una Puesta en Escena de la Compañía de Teatro “No Más”.... Obra Teatral Sintonía A. M.

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Guillermo Jorquera Morales/ Ex Director Teatral del TIUN-TENOR

Sintonía de Amplitud Modulada es una Puesta en Escena de la Compañía de Teatro “No Más”. Trabajo que incorpora varias técnicas que el grupo ha ido recogiendo a lo largo de su intenso caminar; gestual, minimalista, circense, cuentacuentera, y corazón, harto corazón.

El dispositivo escénico, está centrado en una pequeña tarima de más menos un metro cuadrado, pero cuidado no vaya a pensarse que eso basta para poner en escena esta obra, la tarima y la acción debe estar protegida por una cámara negra o gris, iluminada con luces adecuadas, y manejada por un equipo técnico que esté incorporado a la mesa de trabajo de los creadores de la obra, de esa forma no habrá improvisaciones y se logrará la atmósfera que el relato requiere. Además que necesita también del apoyo, aunque menor, de un guión musical, que se sume a lo que el elenco produce en el escenario. En consecuencia debe pensarse siempre en todo este apoyo técnico para poner en escena la obra. Digo esto, porque he escuchado a personas ajenas a la compañía, que dicen que la obra es posible instalarla en cualquier lugar. ¡Ojo con eso!

La obra es un baño de nostalgia para los iquiqueños, también debe serlo para la gente de radio, el texto hace un recorrido por la historia de Iquique, a través de hitos, contados en una caseta de radio por un locutor símbolo, que muy bien pueden trascender las fronteras regionales de nuestro país, porque los hitos señalados pueden ser identificados no solamente en Iquique, ganarle un campeonato de fútbol, a Colo-Colo en el Estadio Nacional, debe haber traspasado todas las frontera regionales, nacionales e internacionales. La tragedia de Cardoen, conmovió al país entero, y la dictadura militar, también tiene un recuerdo negro para todo el mundo, por comentar sólo algunos de los hitos contados.

(Echo de menos, algo del box, y de la música, por ejemplo, gran cantidad de campeones chilenos de boxeo que tenemos en Iquique y toda la parafernalia que se produce en la recepción cuando regresan de los campeonatos nacionales; el box iquiqueño no solo es Godoy y el Tani; y en el caso de la música, la Gaviota de Plata que ganó Calichal, con la Reina del Tamarugal, nuestra “Chinita”. También entiendo que la investigación del Grupo estuvo limitada en el tiempo, por la existencia en el aire de la sintonía A. M.)

El trabajo en el escenario es intenso, serio y honesto, tanto, que de repente puede decirse que son una especie de kamikaze, porque salir al escenario sin maquillaje, sólo con un vestuario básico, enfrentando una batería de luces blancas, que permanentemente los expone casi tal como Dios los echó al mundo. Para eso hay que ser valientes y tener mucho corazón.

Además todos tienen varios personajes que representar, el personaje base, en el fondo son ellos mismos, al que deben regresar internamente, cada vez que cambian de rol, pausa necesaria para relajarse y enfrentar el próximo, creo que es importante tener muy claro esto, descansar cada personaje, y no quedarse con el impulso y la fuerza del anterior, hay que matizar las intensidades, si no el ritmo de la acción corre el riesgo de tener una sola línea, sólo fuerza y sin matiz. Ellos lo logran en casi toda la historia, pero tienen que tener cuidado de no perder esta perspectiva.

No olvidar que una obra es movida por fuerzas dramáticas, y esta obra no es clásica, ya que el protagonismo y el antagonismo lo asumen todos, en distintos momentos, incluida la fuerza mediadora.

El elenco, nos trae una sorpresa, para la habitualidad de los estrenos del año, es la presencia de tres nuevos elementos, que aportan frescura, espontaneidad, relajo, y el espíritu del “jugar” al teatro, que es tan necesario en cualquier elenco y en cualquier historia contada.

Hay un personaje que no está en el escenario, pero sin embargo ha estado presente en todo su elaboración; Carlos Moya el “Pana”, Director; que supo nivelar a estos jóvenes (Carlos, María Olga, y Hans), con los actores de trayectoria como Senén y el Moncho, la actuación estuvo jugada con todos sus “jugadores y jugadora” en un mismo buen nivel.

Además el Director, le da a la obra, desde el comienzo, un aire de comedia musical, similar a “Amor sin Barreras”, por ejemplo. Por la coreografía inicial y los exactos y atractivos movimientos coreográficos que logran los cinco personajes en apenas un metro cuadrado, y rememorando clásicos de la música popular, cantados a capela y que armonizan gratamente con la historia. Finalmente el personaje central lo invade la soledad, destino final que lo persigue durante todo el relato.

En conclusión la obra, es un retorno al estilo de su opera prima, “Fe y esperanza en Chile”, (Abril de 1990), pieza que cuenta una historia real, sólo con la actuación valiente de sus actores; sin maquillajes, sin utilería, sin mobiliario, sólo con un vestuario básico, y con el instrumento fundamental del actor;  “su cuerpo”,  y una historia veraz y conmovedora.

Teatro “No Más” y “Sintonía A. M”. ¡Enhorabuena, larga vida les deseo!

 

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